Miércoles 29 de enero de 2003

 

Caetano disfruta del éxito y ya piensa en "Zuca!"

 

Después de un año de mucho trabajo, Adrián Caetano quiere bajar un poco el ritmo, aunque este 2003 se presenta ya con un filme de terror por delante y un nuevo proyecto para la tevé.

  Buenos Aires (Télam).- Muy contento y agradecido por el año que acaba de terminar, durante el cual estrenó sus películas "Bolivia" y "Un Oso rojo" y se reveló en televisión con la serie "Tumberos", Adrián Caetano se propone ahora gozar de los frutos de su trabajo, pero ya piensa en una nueva tira y en recorrer otros caminos con "Zuca!", una película de terror que filmaría antes de fin de año.
"Me fue muy bien, no me puedo quejar, porque venía muerto, de una lesión muy larga, y esto me puso en carrera una vez más. Volví a encontrarle el jugo a la profesión, pero si bien no quiero seguir con este ritmo enfermizo tampoco quiero volver a tener un parate de tantos años", afirmó el cineasta.
Recién llegado de Chubut, donde realizó el telefilme "Después del mar", basado en la obra teatral homónima de Roberto Gispert, Caetano quiere "parar la pelota" y pensar un poco más tranquilo su futuro, que en lo inmediato parece que volverá a cruzarlo con la productora de Marcelo Tinelli "Ideas del Sur", para una nueva serie televisiva que aún no tiene nombre pero que podría dirigir este año.
"Nadie, excepto Tinelli, te deja hacer lo que vos quieras en la tele. Eso para mí fue fantástico, porque tenía un poco de miedo antes de empezar "Tumberos". Era un miedo lógico, un miedo a no estar a la altura, pero no estéticamente, sino porque no sabía si iba a poder manejar la velocidad de los tiempos televisivos", admitió el director.
El éxito mediático de "Tumberos", una serie fuera de lo común en la que renovó con códigos del cine el lenguaje televisivo y exploró diversas formas narrativas para formular capítulo a capítulo una durísima crítica contra las instituciones, no sólo lo consagró como realizador sino que apuntaló la popularidad que ya había alcanzado con las multipremiadas "Bolivia" y "Un Oso rojo".
"Lo que hice en "Tumberos" fue poner toda la carne en el asador, habrá habido alguna molleja y alguna tira dura, pasó de todo, pero en general me permitió explorar todos los géneros y hacer todo el tiempo algo diferente, que no es algo habitual en la televisión. La onda era probar, probar y probar hasta agotar casi todo", recordó Caetano, quien durante 2002 también incursionó en la publicidad.
"Laburé con absoluta libertad", sostuvo Caetano, y añadió: "Tuve una producción atrás que respondió todo el tiempo. Sentía que me devolvían una pelota redonda, que estaban jugando conmigo todo el tiempo, que me acompañaban, me defendían y participaban activamente del proyecto. Fue una experiencia más que positiva y estoy muy contento".
Sin embargo, Caetano sabe que "la televisión te da un vértigo enorme, te desgasta y, a la larga, te termina ganando". Por ese motivo quiere mantenerse muy activo en el cine y para ello ya está pensando en la posibilidad de comenzar a producir lo antes posible "Zuca!", un filme de género fantástico que escribió hace muchos años, incluso antes de "Pizza, birra, faso". "Quiero ir para otro lado, buscar horizontes nuevos. Me aburro haciendo siempre lo mismo", reveló el cineasta, y en ese sentido agregó: "Lo que yo reclamo para mí y para el cine argentino es que hagamos cosas nuevas. Está todo por hacerse y la voluntad de cambio debería estar siempre, sobre todo acá que todavía no tenemos una industria consolidada".
Caetano, que ya había abordado el género fantástico en su cortometraje "Cuesta abajo" y lo retomó en algunos tramos de "Tumberos", se propone contar en "Zuca!" una historia de terror protagonizada por un niño autista con un don sobrenatural que le da poderes sobre los perros, a los que utilizará para vengarse del asesinato de su padre.
"Es un guión que no tiene tiempo ni lugar, pero sí un arraigo social muy grande con algunos temores de la clase media. Lo único caro sería conseguir un excelente entrenador de perros y un despliegue de producción que me permita tener 200 perros corriendo por la calle", adelantó Caetano, a quien le gustaría filmar la película en algún pueblo del interior de la Argentina.
Amante del cine de género, Caetano dice que hace películas "para que la mayoría de la gente las vea. Creo que el público está buscando en el cine ciertas cosas que no son ideología, ni bajadas de línea, ni verdades sobre el mundo. La gente quiere ver una historia donde haya personajes con los cuales poder identificarse o no, y divertirse un rato".
Para Caetano, "al cine argentino le falta consolidarse como industria. No hay un rumbo en común ni una concepción de ayudarse, contenerse, cuidarse y crecer juntos. Por eso -planteó-, lo que estaría bueno es que se forme un bloque un poco más homogéneo, pero no en lo estético, sino en el sentido de limar diferencias y empujar todos para el mismo lado".
"Pero lo que más esperanza me da de este país -dijo Caetano- es que acá hay un futuro enorme porque está todo por hacerse.Todavía no hay nada hecho. Por ejemplo -agregó-, yo no hice nada todavía, tengo dos películas y media y una serie de televisión, y eso no es nada. Me faltan muchísimas cosas por hacer".
   
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