Miércoles 15 de enero de 2003 | |||
|
El verdadero canto de los sentimientos |
||
Dos coros de Viedma -dirigidos por Juan Carlos Chillón- se esfuerzan desde hace dos años en llegar a la gente, donde y como sea, haciendo de su arte una tarea solidaria y popular. |
|||
Dirigidos desde hace dos años por Juan Carlos Chillón, las agrupaciones de adultos y de jóvenes están sostenidas desde el año pasado por dos gremios viedmenses. Se trata de dos grupos diferentes, aunque según dice el director "la mayoría de las veces trato que estén juntos, porque ideológicamente los grupos son iguales y tienen un repertorio que los une; ante la gente es una muestra de cómo pueden cantar adolescentes de 13 a 18 años, y cómo pueden hacerlo desde los 18 a más de cincuenta años; y cuando se juntan se pueden apreciar juntos la experiencia del adulto con la energía de los jóvenes". Los coreutas terminaron el 2002 con treinta adultos y veinte jóvenes, totalizando cincuenta presentaciones con su repertorio de música popular, donde siempre figuran "Te quiero", "Canción de caminantes", Vamos a andar", "Un vestido y un amor", alguna zamba y chacarera. Para este año, el coro de adultos en dos o tres meses estrenará siete temas, mientras que los jóvenes, en cambio, van a empezar a trabajar las cuatro voces corales. La agrupación de adultos nació en el 2001 como coro popular independiente, y en el 2002, "porque soy un tipo que nunca baja la cabeza, conseguí que dos gremios apoyaran a estas iniciativas -Asociación del Personal Legislativo (Apel) y La Bancaria-, y en los dos hemos sentido una sensación de contención espectacular. Los gremios vinieron a ocupar el rol del estado y eso fue muy bueno. No nos cansamos de agradecer porque generalmente los gremios tienen actividades recreativas, pero en la parte cultural casi nunca se meten", comenta Chillón, y acota que las agrupaciones sindicales "saben que están haciendo algo diferente, aunque recién están viendo qué tipo de coro apoyan. Estas cosas se van explicando de a poco". La historia de Chillón con la región se remonta a dos décadas, cuando llegó en 1980 para dirigir el coro municipal de niños, luego en "84 forma el municipal de jóvenes, "y luego de esto, se comienza a formar el coro de acción popular desde Cultura de la provincia - en una época en que se movilizaba mucho y se llenaban las cabezas de ideas-. Y empezó una lucha entre lo tradicional y lo nuevo, que luego con el tiempo uno se da cuenta que existen espacios para todos". Después se dedicó al coro de Río Negro en Buenos Aires, una experiencia muy fructífera cuya disolución en el 2000 fue un golpe muy duro; pero Juan Carlos deja en claro que los dos coros de hoy "me hicieron ver que el mundo continúa". El coro refleja la sociedad El director explica que "el coro, básicamente, es un emergente de la sociedad, tiene que reflejarla y accionar en todos los lugares. Es una mezcla de todos sus integrantes y tiene el objetivo de cumplir una función solidaria y de estar donde lo llamen, siempre, en las condiciones que sea, por supuesto tratando que la música suene bien, sin despreciar nunca a ningún público". Chillón expone que la diferencia con las formaciones tradicionales "es que la estructura es democrática y todo el mundo discute todo, le dice al director lo que piensa; hay cuestionamientos terribles y es muy desgastante, pero es un espacio donde se muestra todo lo bueno y todas las miserias de cada uno. Todos los sentimientos, desde el amor al odio, cuando cantan están ahí, porque son personas vivas. En los coros tradicionales, se pretende que uno deje afuera todo eso; y se está mintiendo. Es una base europea, pero esa cultura no es la nuestra". |
|||
® Copyright Río Negro Online - All rights reserved
|
|||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación |
|||
|