Sábado 28 de diciembre de 2002

 

La CEB le pagó una parte a Edersa y evitó el corte de luz

 

La prestadora del servicio de electricidad de Bariloche depositó una porción de los dos millones que le debe a la empresa provincial. De esta manera, consiguió aire para adquirir el resto del dinero sin el fantasma de la suspensión del suministro a la ciudad desde Alicurá.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La Cooperativa de Electricidad de Bariloche (CEB) le pagó ayer 350 mil pesos a Edersa a cuenta de la abultada deuda que mantiene por compra de energía y alejó así el riesgo de sufrir un corte en la provisión que recibe a través de la línea que viene de Alicurá.
El lunes próximo liquidaría los 152 mil pesos restantes de la última facturación e iniciará una negociación para acordar cómo pagará la deuda "vieja", que suma otros 1.200.000 pesos.
El desembolso de ayer descomprimió en parte la urgencia generada por la amenaza de Edersa de cortar el suministro a Bariloche si la cooperativa no pagaba.
El jueves los directivos de la cooperativa se dieron por notificados de un aviso de corte enviado por Edersa que advertía que en caso de no cumplir con el pago de la deuda hoy le cortarían el suministro de electricidad.
Los directivos de la CEB tenían preparado un recurso de amparo para bloquear la posibilidad de que su proveedora aplique esa sanción, pero ayer decidieron dejar de lado por ahora la vía judicial.
La línea de 132.000 voltios que nace en Alicurá, va hasta Pilcaniyeu -desde donde abastece a parte de la Línea Sur- y finaliza en Bariloche es la de la provincia y fue concesionada a Edersa en 1996, junto con la distribución de la luz en la inmensa mayoría del territorio rionegrino.
Edersa no sólo le vende la electricidad a la CEB sino que además actúa como transportista de esa energía.
La deuda es, precisamente, por las facturas de ambos negocios.

El papel del gobierno

Al conflicto surgido entre ambas empresas no es ajeno el gobierno provincial.
En medio de las agitadas gestiones para reunir el dinero requerido, la CEB había advertido que su capacidad de pagos "se verá cada vez más resentida" si la provincia mantiene la prohibición de cortar la luz a las reparticiones públicas y a los particulares morosos que demuestran su imposibilidad económica de hacer frente al pago de las facturas.
La administración de Pablo Verani le debe a la cooperativa barilochense 1,6 millón de pesos -de los cuales habría librado ayer 400 mil- y el municipio otros 600 mil.
Otra suma no cuantificada se acumula por los incumplimientos de usuarios que son empleados públicos, desocupados o indigentes y que también gozan por ley de la continuidad del servicio.
Ayer el presidente de la CEB, Roberto Ceaglio, reconoció que esas normativas le generan un perjuicio decisivo. También se quejó de la asimetría que le permite a Edersa compensar con la provincia los consumos impagos con sus propias liquidaciones de ingresos brutos, un gravamen que la CEB no tributa.
Otra distorsión tiene que ver con los intereses que la Cooperativa acumula por sus facturas caídas con Edersa que, según Ceaglio, son "una vez y media" más altos que los que tiene autorizado a cobrarle a sus clientes morosos.
Aún así, el titular de la CEB se inclinó por "no echarle toda la culpa a la provincia" y dijo que el ahogo económico que hoy sufre la prestadora eléctrica local "se debe también a la herencia de la administración anterior".
   
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