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Jueves 26 de diciembre de 2002 | ||
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La causa de la cámara oculta podría quedarse sin juez |
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Ferreyra podría recusar al juez Gago, quien por su parte podría apartarse voluntariamente. Ambos tienen antiguas diferencias. En ese caso, el expediente irá a sorteo y se designará un nuevo magistrado. En el horizonte está la feria judicial. |
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Gago recibió el lunes todo el expediente iniciado a partir de la denuncia del legislador Jorge Taylor, quien filmó a Ferreyra y al gobernador Jorge Sobisch con una cámara oculta. De acuerdo con la fiscalía de Delitos contra la Administración Pública, el vicepresidente de la Legislatura debe ser indagado como presunto autor del delito de cohecho, ya que le habría ofrecido un crédito a Taylor a cambio de que se siente en su banca para obtener el quórum que el oficialismo necesita para aprobar las ternas de candidatos al Tribunal Superior de Justicia. En esa misma causa la fiscalía pidió la indagatoria del abogado Martín Segovia, y solicitó que el gobernador Sobisch y el diputado Eduardo Carbajo sean citados a una declaración explicativa. El juez Gago, quien fue designado por sorteo, debe decidir si hace lugar a los pedidos de la fiscalía. Pero antes que eso podría recibir un pedido de la defensa de Ferreyra para que se aparte de la investigación, o inclusive podía decidir él mismo excusarse de intervenir en el caso. Las diferencias entre Gago y Ferreyra se remontan a la anterior gestión del gobernador Sobisch, cuando el actual legislador era administración del ISSN y fue acusado de "fraude en perjuicio de la administración pública" por el caso de la hostería Ruca Malén. Corría el año 1994, Gago era fiscal de Instrucción y pidió la detención de Ferreyra, que se prolongó por unas pocas horas. En diciembre de 1999, pocos días antes de asumir como diputado en la actual gestión, Ferreyra fue absuelto por un fallo de la Cámara Primera pese a que otro fiscal, Jorge Otegui, había pedido que lo condenen a 7 años de prisión. Ferreyra devolvió la gentileza al año siguiente. Para entonces Gago ya era juez y fue sumariado por el TSJ por su desempeño en un confuso episodio en el que estuvieron involucrados una menor de edad y un abogado que recuperó rápidamente su libertad. El legislador aprovechó la oportunidad y le pidió al TSJ que investigue al magistrado porque "surge que de la comparación de ambos casos con muy diversa calificación delictual, el juez Gago actuó violando ostensiblemente el principio constitucional de igualdad, en abierta y franca intencionalidad hacia mi persona". Estos antecedentes de la mala relación entre ambos podrían resultar decisivos en este momento. "Tengo que hablarlo con Ferreyra, pero es posible que recusemos al juez", dijo el defensor Oscar Pandolfi. "No voy a decir una palabra. Veremos qué pasa", afirmó el magistrado cuando este diario le preguntó si se apartará de la causa. El Código Procesal establece varios motivos por los cuales un juez puede inhibirse de intervenir en una expediente, o puede ser recusado por el imputado. Por ejemplo, "si antes de comenzar el proceso hubiera sido acusador o denunciante de alguno de los interesados, o acusado o denunciado por ellos". También contempla el apartamiento "si tuviera amistad íntima o enemistad manifiesta con alguno de los interesados", así como razones que "le provoquen violencia moral". Si Gago es recusado y no lo acepta, el caso irá a una Cámara que definirá la situación. Pero si se aparta por algún motivo, el expediente irá otra vez a sorteo. Para entonces se estima que habrá comenzado la feria judicial de verano, y la causa recién volvería a tener novedades en febrero. |
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