Jueves 26 de diciembre de 2002

 

Poco para festejar en una Venezuela muy dividida

 

Los venezolanos hicieron caso omiso de los pedidos para dejar de lado las diferencias políticas en Navidad. Lejos de eso, la oposición intensificó su protesta en contra del gobernante, manteniendo paralizada la actividad petrolera. En tanto, miles de "chavistas" manifestaron su respaldo al presidente, mientras el gobierno aceleró su "limpieza" en la petrolera estatal.

  CARACAS (Reuters) - Las consignas políticas y el desabastecimiento causado por un paro opositor de 24 días signaron el día de la Navidad de los venezolanos, amargamente divididos en una disputa en torno del presidente Hugo Chávez.
Sentada en una acera a pocos metros de la fila de más de 100 vehículos que esperaban para cargar gasolina, uno de los artículos que más escasea desde el inicio del paro, Iraida Gómez calificó la situación de "caótica".
"No pude visitar a mi familia en Valencia -a unos 150 kilómetros al oeste de Caracas- para Navidad porque no hay gasolina", dijo la médica, una adversaria de Chávez, mientras miraba expectante hacia un camión cisterna que descargaba lentamente el preciado elemento. Pero aseguró que la protesta, que busca presionar al gobernante para que renuncie y llame a elecciones, debe continuar. "El que persevera alcanza", afirmó.
Los opositores a Chávez recibieron la Navidad con un estruendoso "cacerolazo" de medianoche en rechazo a Chávez, a quien acusan de llevar al quinto exportador mundial de crudo a la ruina económica y de querer imponer un gobierno comunista .
El paro ha detenido casi por completo las operaciones de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), corazón de la economía . La producción ha caído por debajo de los 200.000 barriles por día (bpd), lo que equivale al 6,5% de los 3,1 millones de bpd de noviembre. Ambos bandos se acusan mutuamente de la crisis, que ha provocado una creciente escasez de combustible y el desabastecimiento de bienes básicos.

Nada de paz y amor

Chávez, quien se ha negado reiteradamente a renunciar, dice que el paro es una estrategia "golpista" de élites opuestas a su proyecto de justicia social para los pobres y afirma que sus adversarios están tratando de repetir los hechos de abril, cuando fue derrocado por 48 horas por militares y civiles.
Los deseos de "paz, amor y unidad" lanzados la víspera por el mandatario y por los líderes opositores de la paralización no lograron enfriar la tensión política que mantiene en vilo a la nación sudamericana.
Chávez, un teniente coronel retirado, transmitió el martes un mensaje "infinito de ternura y amor, de unión" para todos los venezolanos. Pero por otra parte su gobierno ha comenzado a despedir a gerentes y trabajadores de PDVSA que se han sumado al paro
Janeth Avila, una simpatizante del gobernante que participó en una fiesta frente a una sede de PDVSA en donde los "chavistas" mantienen una vigilia desde el inicio del paro, dijo que "esta es una crisis muy fuerte, pero estamos dispuestos a luchar hasta que Hugo Chávez se levante".
El médico Guillermo González, otro simpatizante de Chávez que esperaba para cargar gasolina, dijo que "nadie tiene derecho a robarle la Navidad a nadie, por mucho que no les guste un presidente".

Denuncian despidos

Caracas (dpa) - Dirigentes opositores denunciaron que el gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, está poniendo en marcha su anunciada "limpieza" en la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), despidiendo a casi 100 ejecutivos de la corporación que han apoyado la huelga general que ayer cumplió 24 días.
Los ejecutivos, de diversas áreas de exploración y producción de PDVSA, fueron notificados de la medida el martes, horas antes de comenzar las celebraciones de Navidad, informó el líder de los gerentes rebeldes, Juan Fernández.
"Tenemos que "agradecer" al señor Chávez que las navidades de estas personas sean suspendidas. Por un lado, nos llaman a la conciliación, a la paz y a que seamos una familia y por el otro lado saca el garrote", señaló el gerente.
Agregó que junto con los despidos, el gobierno ordenó el arresto de unos 90 capitanes, oficiales y tripulantes de la marina mercante que se sumaron a la huelga contra Chávez, negándose a movilizar los buques petroleros.
Fernández divulgó una comunicación en la que figuran una serie de gerentes despedidos, entre ellos el vicepresidente de PDVSA Jorge Kamkoff, quien la semana pasada firmó una declaración en la que advertía que sin la incorporación de todos los trabajadores de la petrolera no se podrán normalizar sus operaciones.

   
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