Viernes 20 de diciembre de 2002

 

El FMI negó avances con la Argentina e insiste en pedir el fin de los amparos y más ajuste

 

Duhalde había dicho que "antes de fin de año" cerraría la negociación

  BUENOS AIRES (DyN) - El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó ayer que "no hay nada para anunciar" sobre un inminente acuerdo con la Argentina y reclamó el fin de los amparos y el corralón y un ajuste fiscal, ante el optimismo reflejado por el gobierno argentino sobre la posibilidad de un resultado positivo para antes de fin de año.
El portavoz del FMI, Thomas Dawson tomó distancia en cuanto a esa eventualidad, aunque consideró que la misión que estuvo en Buenos Aires mantuvo "buenas conversaciones" con el equipo económico que encabeza Roberto Lavagna.
Casi en forma simultánea, mientras el presidente Eduardo Duhalde anunciaba en la Casa Rosada que "seguramente antes de fin de año estaremos cerrando el acuerdo", el vocero de la entidad advertía en Washington que "no tengo nada que anunciar en este momento".
El jefe del Estado expresó que "estamos muy cerca del acuerdo, toda la parte técnica está cerrada, pero hay dudas sobre la redolarización".
Duhalde remarcó que "ya mas discusiones y análisis técnicos no quedan, solo queda que el staff del FMI cierre el acuerdo pero lo de la Corte es uno de los temas que están planteando por escrito el G7 por la incertidumbre que plantea. Estamos en la víspera de un acuerdo ya no hay mas para discutir técnicamente, lo peor que podría pasar es la incertidumbre porque los bancos no prestan dinero".
Pero enfatizó que "es necesario que se definan para seguir avanzando en acuerdos internacionales o si están decididos a votar otra cosa habrá que ver como se sigue".
Más adelante, Duhalde subrayó que "tendríamos que sentarnos a ver bien el fallo. Creo que estamos saliendo, es un secreto a voces, que la Argentina crece, sale de la recesión, habría que dar tiempo a la recuperación para que se consolide este proceso y esto genera incertidumbre". Insistió luego con que "yo siempre dije que era importante que al ahorrista se le garantice valor adquisitivo".
Más cauteloso, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasoff, sostuvo, durante su habitual conferencia de prensa, que el acuerdo con el FMI "avanza", pero sostuvo que "no hay que adelantarse a los acontecimientos".
Dawson volvió a explicar que la entidad mantiene diferencias con la Argentina relacionadas con el programa monetario del año que viene, básicamente la necesidad de ponerle fin a los amparos del corralón, y la cuestión fiscal.
El portavoz del FMI descalificó versiones de una agencia internacional que indicaban que la misión que estuvo en Buenos Aires había descubierto un "déficit oculto" de 2.500 millones de dólares en el presupuesto que el Congreso se apresta a aprobar. "Decir que se 'descubrió' una brecha de 2.500 millones de dólares en el presupuesto es una exageración", dijo Dawson quien aseguró de todas formas que "ese no es el foco" de las conversaciones, que giran más bien en torno a "la situación fiscal y un ancla monetaria creíble" para el régimen cambiario.
   
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