Martes 3 de diciembre de 2002

 

Murió la mujer herida en un incendio en Bariloche

 

Los familiares de la víctima denunciaron ayer al esposo. Se investiga cómo comenzó el fuego en la casa del barrio Omega. Los vecinos aseguran que los bomberos y la ambulancia tardaron.

 
Los vecinos aseguraron que los bomberos tardaron 20 minutos en llegar. La casa quedó reducida a cenizas.
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El trágico resultado del incendio que se declaró el sábado por la noche en dos viviendas del barrio Omega y ocasionó la muerte de una mujer abrió interrogantes sobre las causas que lo originaron y la eficacia de las organizaciones que intervinieron para auxiliar a los damnificados.
Los familiares de la víctima sospechan que el esposo pudo haber tenido algo que ver con el origen del fuego y lo denunciaron a las autoridades, en tanto que los vecinos criticaron la tardanza en prestar auxilio de los bomberos, la ambulancia del hospital y la policía.
El incendio se inició a las 22.15 del sábado en la vivienda situada en Miramar y Kamerer, del barrio Omega, que compartían Omar Salinas y Marcia Pellegrini, de 27 y 24 años respectivamente, pero en pocos minutos, antes que llegaran los bomberos se propagó a la vivienda lindera, que ocupaba Amado Fernández.
Salinas resultó con lesiones de escasa importancia en ambas piernas y fue asistido en el hospital local, pero su mujer sufrió quemaduras en la mayor parte del cuerpo y murió a las 21.15 del domingo, víctima de sus graves lesiones.
De acuerdo con el testimonio de los vecinos, los voluntarios fueron citados en varias oportunidades y tardaron más de 20 minutos en llegar al incendio, pese a que el cuartel Central se encuentra a sólo tres kilómetros del lugar del siniestro. Cuando desplegaron sus mangueras, los bomberos fueron abucheados y también hubo conatos de agresión, porque el incendio estaba totalmente declarado y debieron emplear las líneas para apagar las brasas que quedaban de las dos casillas. Aseguraron los testigos, además, que la ambulancia del hospital tardó más de 25 minutos en llegar, en tanto la víctima yacía sobre la tierra de la calle, totalmente quemada, y que más tarde todavía habían llegado los uniformados de la comisaría 28, posibilitando que se alterara el lugar de los hechos, y actos de saqueo que los vecinos no pudieron impedir.
Los antecedentes alcohólicos de Salinas y los presuntos malos tratos a que habría sometido a su hija motivaron la denuncia de los padres de Marcia Pellegrini, pero ellos no estuvieron presentes cuando ocurrieron los hechos y no tienen elementos objetivos para sustentar una acusación.
Los vecinos fueron llamados a declarar, pero las versiones que comentan en las puertas de sus casas no son las que luego corroboran con sus firmas. En la calle Miramar aseguran que Salinas salió primero de la vivienda, con fuego en la parte baja de sus pantalones, y unos instantes después su mujer, hecha una tea y asegurándole a su esposo que lo amaba. Más tarde, ante los vecinos que le prestaron los primeros auxilios, la mujer se habría responsabilizado del incendio, argumentando que el fuego se había iniciado cuando trató de encender un cigarrillo. En base a la diversidad de versiones y declaraciones, los peritos bomberos de la policía tratarán de determinar si quedaron restos de combustible en las prendas de los damnificados.
El hecho fatal tiene como reciente antecedente el ocurrido el 3 de noviembre, cuando un mecánico que arreglaba un auto sufrió graves quemaduras en el rostro y la parte superior del cuerpo al incendiarse el combustible que caía del vehículo, y 20 horas después murió en el hospital local sin que pudieran controlar sus lesiones.
   
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