Sábado 30 de noviembre de 2002

 

No llegan las inversiones para las escuelas de Bariloche

 

Es conocido el déficit de edificios en la ciudad y el estado de muchos colegios. Sin embargo los proyectos para nuevas construcciones están archivados por el Consejo de Educación. Creció la matrícula sobre todo en el nivel medio y en especial en los barrios del oeste de la ciudad.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Pese al crecimiento de la matrícula y el mal estado de muchos edificios escolares, el CPE mantiene archivados todos los proyectos para construir nuevos establecimientos en esta ciudad.
El mayor déficit se encuentra en el nivel medio y en especial en los barrios del oeste de la ciudad, donde hay cientos de chicos que cada día tienen que viajar casi 20 kilómetros hasta el centro, con la necesaria inversión de tiempo y dinero.
Varias juntas vecinales del sector hicieron oir sus quejas por la postergación que sufren en materia educativa. La supervisora de nivel Medio, Carola Graziosi, reconoció que en materia edilicia las necesidades son muchas, pero entre las más urgentes está la de crear un nuevo CEM para los barrios del oeste.
Bariloche tiene una docena de escuelas secundarias, 10 de las cuales se concentran en el casco céntrico, una funciona en las 34 Hectáreas y la otra es el CEM 2 de Melipal, ubicada en el kilómetro 4,800.
Esta última y el colegio Amuyén (que es público de gestión privada y está en el kilómetro 7,200) no alcanzan para atender toda la demanda de chicos que egresan de séptimo grado en las cinco escuelas primarias ubicadas en el Oeste.
Graziosi dijo que lo ideal sería crear un nuevo secundario entre Puerto Moreno (km. 10) y el Hipódromo (km. 13), para reducirles a los chicos todo lo posible la necesidad de viajar.
Pero también señaló que la escuela a construir debe responder a las necesidades, contar con todas las dependencias, gimnasio y espacio circundante "como tiene por ejemplo el CEM 96 de Dina Huapi". Este último fue inaugurado hace un par de años, al igual que el CEM 105 en el centro de Bariloche, que está a medio terminar y no tiene siquiera un patio interno.
La supervisora dijo que también urge una solución para los edificios que no dan más. Por ejemplo el de la calle Albarracín, donde funcionan tres CEM en condiciones deplorables, o el CEM 99, improvisado en un edificio alquilado donde las aulas tienen columnas en el medio.
Aun con todas las necesidades a la vista, Educación no tomó iniciativa alguna para ampliar la capacidad de contención de las escuelas medias en Bariloche. Las únicas obras en marcha, correspondientes al plan Prodymes, están dirigidas a crear laboratorios y bibliotecas, pero no a ampliar las vacantes.
A diferencia de años anteriores, esta vez la inscripción a primer año no desbordaría la disponibilidad.
Las cifras definitivas se conocerán recién la próxima semana, pero hay indicios de que la matrícula bajará, por la preferencia creciente por las escuelas privadas y también por un cierto porcentaje de deserción.
La presidenta de la junta vecinal Campanario, María García Teglia, protestó porque los barrios del oeste vienen quedando relegados en muchos servicios "entre ellos el educativo".
   
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