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Lunes 25 de noviembre de 2002 | |
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¿Libertad de prensa? |
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La semana en Roca |
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| Mientras era vicepresidente segundo de la Sociedad Interamericana de Prensa, a Danilo Arbilla le pidieron que aportara un artículo para la introducción del libro "La libertad de prensa y la ley", que se editó en 1999. Entonces el director del semanario "Búsqueda" de Montevideo escribió: "Este libro no debería existir, si nos atenemos a la máxima de que no hay mejor ley de prensa que la que no existe". Esta nota no debería existir. Uno no debería reclamar por seguridad para desarrollar libremente su trabajo. Lamentablemente en Río Negro y más aún en Roca, núcleo del poder veranista, las garantías parecen ser cada vez menos sólidas para los encargados de informar a la sociedad. En otro párrafo, Arbilla considera "ridículo pensar que los gobiernos están facultados para reglamentar la libertad de expresión, la libertad de prensa y mucho menos para censurar al pueblo o decirle a los ciudadanos qué es lo que pueden ver, leer u oir o qué es lo que pueden decir, opinar o informar. Es el pueblo el que puede censurar al gobierno y jamás el gobierno censurar al pueblo, como sostenía James Madison". Por estas latitudes pasa todo lo contrario y lo peor es que la ley elegida para marcar los límites es la de la selva. Pasó el viernes pasado, cuando un grupo de jóvenes a las órdenes del director de Servicios Públicos del municipio, Luis Salvucci, se encargó de evitar que un reclamo de la Corriente Clasista y Combativa llegara al gobernador Pablo Verani. Y como la prensa registró los métodos utilizados para disuadir a los desocupados, las agresiones y amenazas se trasladaron a reporteros gráficos y periodistas. Los protagonistas principales de la violencia son siempre los mismos, pero esa particularidad no ofrece ninguna seguridad en Río Negro. La sensación es que la impunidad con la que actúan crece a diario. ¿Hasta cuándo el gobernador Verani permitirá que la respuesta a los disidentes con su administración sean los golpes y no el debate de ideas? ¿Hasta cuándo amparará a los que trasladan a los violentos? ¿Hasta cuándo el intendente Ricardo Sarandría permitirá que un funcionario municipal abandone sus tareas y oficie de custodia del gobernador? "Luis Salvucci forma parte de acuerdos con Verani", expresó Sarandría a este diario el 9 de mayo de 2001. ¿Cuál es el acuerdo? ¿Que utilice el mismo handy con el que cumple su función municipal para dirigir el accionar de los violentos del viernes? Los roquenses pagan 1.800 pesos mensuales por una persona que se encargue de los Servicios Públicos, no por una custodia para Verani. ¿Hasta cuándo la Policía permitirá que terceros cumplan con su indelegable función de resguardar la integridad física del gobernador? A la luz de los hechos, el despliegue de personal uniformado y de civil que hubo el viernes en el hospital fue en vano. Los violentos llegaron, actuaron, se dieron el gusto de saludar a Verani y se fueron tan libres como llegaron. Por último, también es bueno mirar hacia el costado y darse cuenta de quiénes rodean a uno en su labor cotidiana. ¿Hasta cuándo habrá periodistas que se empeñan en desviar con preguntas las conferencias en las que se tocan temas que ponen incómodos a los funcionarios? Pasó el viernes, pasa desde hace mucho, desde que se alejaron -si es que alguna vez lo cumplieron- del verdadero rol del periodista. Porque trabajar para un partido político no está mal, ocurre que muy pocos saben hacerlo con dignidad. En fin, demasiadas preguntas. Cuando alguna de ellas comience a tener respuesta la libertad de prensa habrá dado un paso adelante. Hoy, en esta ciudad, el camino está vallado. Hugo Alonso halonso@rionegro.com.ar |
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