Roberto Ceaglio es el nuevo presidente de la CEB

El Consejo de Administración eligió a las autoridades. La flamante conducción aseguró que ahora se aprobará el balance. Negaron que Fenoglio sea designado en alguna gerencia.

Ayer se realizó la primera reunión del Consejo Directivo de la CEB con su nueva composición.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El ingeniero Roberto Ceaglio es el nuevo presidente del Consejo de Administración de la CEB, que ayer eligió autoridades en su primera reunión tras la renuncia masiva de la conducción "blanca".
Cuando no habían terminado de asimilar la adrenalina generada por la asamblea de la noche anterior, varios consejeros recién electos estuvieron ayer desde las 6 en la sede de la cooperativa, donde recibieron uno por uno a los empleados que llegaban a su trabajo.
El gesto no alcanzó para contrarrestrar la incertidumbre que vive el personal ante el cambio de autoridades, que no estaba previsto en el estatuto pero se terminó imponiendo ante la presión generado por la lista Roja, amplia ganadora en los últimos comicios.
De ese modo, en lugar de colocar tres consejeros en minoría y los síndicos, como le correspondía según los cargos puestos en juego, los rojos se quedaron con todo el poder.
El nuevo Consejo de Administración quedó conformado con Ceaglio como presidente, Rodolfo Vázquez en la vicepresidencia, Pablo Frisch como tesorero, Eduardo Fuccillo protesorero, Luis Valderas secretario y Daniel Moyano prosecretario. Las dos vocalías titulares quedaron a cargo de Sandro Gressani y Lisaedo Ibáñez, mientras que en las sindicaturas titular y suplente fueron designados Carlos Lavate y Carlos Palermo.
De la primera reunión no trascendieron otros detalles, aunque difícilmente hayan pasado el tratamiento que piensan darle al asfixiante pasivo financiero que arrastra la CEB.
De cara a ese problema puntual, lo ocurrido en la asamblea sumó objetivamente una nueva complicación con el rechazo de la memoria y el balance del último ejercicio, que fue votado con abrumadora mayoría por los delegados rojos.
Instantes después, "Río Negro" le preguntó al empresario Diego Fenoglio si la desaprobación del balance no entorpecía el futuro inmediato de la Cooperativa. Pero el organizador y principal referente de la Roja aseguró que todo formaba parte de un cálculo estratégico. "El balance había que rechazarlo porque de otra manera los consejeros blancos no iban a renunciar -dijo-. Ahora se le agregarán los ajustes que le faltan y en pocos días va a ser aprobado".
Aunque Fenoglio no es delegado ni consejero de la CEB y tampoco figura como asociado, ayer participó activamente de la reunión del Consejo de Administración, que se realizó como de costumbre a puertas cerradas.
Ceaglio dijo que los consejeros lo habían "invitado" en uso de sus atribuciones. Desmintió además que estén pensando en designar al empresario en alguna gerencia o cargo ejecutivo de la Cooperativa. Aunque no dio mayores detalles sobre sus primeras gestiones, el presidente de la CEB dijo que ayer comenzaron a "encaminar" los asuntos de resolución inmediata, como el pago a proveedores, y también iniciaron entrevistas "uno por uno" con los empleados de dirección.
En los próximos días la nueva conducción tiene previsto exponer en una conferencia de prensa qué rumbo piensa adoptar respecto de algunas de sus promesas de campaña como la rebaja de la tarifa eléctrica y de los altos sueldos del personal jerárquico y la transparencia administrativa que durante largo tiempo reclamaron para la CEB.

Todos se preguntan qué hará De Ferrariis

Aunque es prematuro conjeturar qué hará Leonardo De Ferrariis luego de renunciar a la conducción de la CEB, nada indica que vaya a quedarse de brazos cruzados.
De Ferrariis presidió la Cooperativa durante más de una década. Fue el responsable de la política de diversificación de negocios de la empresa y la creación de varias SA satélites que hoy están al borde del quebranto y terminó dejando su cargo de consejero junto a sus pares blancos, cuando aún tenían mandato por cumplir.
Aunque no quiso hacer declaraciones, en la misma noche del jueves dejó entrever que no se va a desentender de la CEB y perseguirá a los nuevos consejeros para escrutar cada decisión que tomen. Una suerte de cambio de roles respecto de lo que ocurrió en el último año.
Para los delegados de la lista Blanca, que quedaron en franca minoría, tampoco será mucho el margen de acción. Lo visto y escuchado en la asamblea demostró que la convivencia armónica será imposible, ya que los rojos impusieron sus criterios sin ceder a ninguna reflexión.
Los delegados derrotados también se fueron del recinto tras la renuncia de los consejeros de su mismo signo.
Un representante rojo los invitó a quedarse pero no encontró eco. "Quédense, que su opinión vale", les propuso. "No me interesa darle la opinión a un sordo", le respondió enojado el delegado blanco Rafael Henkel. (AB)