Viernes 22 de noviembre de 2002
 

Quieren sumar 90.000 hectáreas al ejido

 

El Concejo Deliberante aprobó el pedido de ampliación.

  CHOS MALAL (ACHM).- Chos Malal busca expandir su ejido ante la falta de tierras para futuros planes habitacionales y la radicación de otros servicios. En estos días el Concejo Deliberante aprobó la ordenanza 1834/02 que autoriza al Ejecutivo a solicitar la ampliación de la jurisdicción, que ahora debe esperar la sanción de la Legislatura provincial.
Chos Malal experimentó en los últimos años un crecimiento importante y se han ocupado los terrenos disponibles en la construcción de planes habitacionales, y ya no cuenta con tierra para nuevos asentamientos.
Esto motivó que la Dirección de Ordenamiento Territorial dependiente de la Secretaría de Obras y Servicios Públicos del municipio presentara la propuesta de ampliación del ejido urbano.
De esta manera se pretende una importante expansión que posibilitará pasar de 8.000 hectáreas a casi 100 mil hectáreas. Los parajes Chapúa y La Salada quedarían dentro del ejido urbano de esta ciudad, como así también la zona donde se encuentra ubicado el Aeródromo Oscar Reguera.
Otro de los aspectos fundamentales de la ampliación de la jurisdicción, es que también quedarían incluidos en el mismo el Cerro Wayle y una parte del Parque Provincial Tromen, lo cual tiene su importancia debido al impulso turístico que se le pretende dar a la zona.
La comuna "desea incorporar nuevos espacios para ampliar a futuro su planta urbana".
Pero además el municipio podrá mejorar los servicios y asistencia social a quienes viven en estos parajes rurales, se argumentó.
A los pobladores de La Salada y Chapúa sólo se les han aportado soluciones temporarias a través de convenios con la provincia.
El proyecto cuenta con el aval de los municipios de Tricao Malal y la Villa del Curi Leuvú, con quienes la comuna ya se ha firmado los correspondientes acuerdos de límites. No así con el municipio de Taquimilán, que pretendería que el aeródromo quede dentro de su ejido.

María Olga, tejidos y alimentos artesanales


La confección y venta de productos artesanales constituyen el medio de vida de María Olga Jara, una pobladora de Chos Malal que elabora desde hace años alimentos artesanales como el ñaco sin dejar de lado las comidas tradicionales, entre ellas exquisitas empanadas.
Pero además, María teje delicadas prendas, especialmente de lana de oveja.
La mujer tiene 59 años y hace 15 llegó a Chos Malal provenientes de la zona de Trocomán.
Aquí comenzó a poner en práctica lo que había aprendido desde niña.
A veces en la feria comunitaria y otras puerta a puerta, María vende sus productos.
Entre los alimentos artesanales se encuentran el mote, el ñaco y los quesos de vaca.
Pero además prepara comidas tradicionales como el locro, las empanadas y las humitas.
También hay quienes le compran la leche de vaca y prendas de lana.
Hasta hace poco tiempo los tejidos eran a mano y a telar, pero actualmente este último quedó atrás.
Por encargo, María teje pulóveres, chalecos y medias de lana de oveja. Pero además, y a pedido de sus clientes, lo hace de lana comprada.
Se levanta muy temprano y elabora con dedicación y esmero los quesos, el mote y el ñaco que venderá y cuyos ingresos constituyen su sustento diario.

El terror de los autos

La calle 25 de Mayo, que constituye el acceso a la ciudad, se encuentra en un estado calamitoso.
Los conductores sufren con una importante cantidad de baches de distintas dimensiones. Aunque el problema es de larga data, aún no se le ha dado solución.
Los automovilistas toman precauciones cada vez
que deben
acceder a esta arteria.
   
MAS INFORMACION

asdfsdf

    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación