Viernes 1 de noviembre de 2002
 

Lula promete "cuidar a los pobres como a mis hijos"

 

Al tiempo que rechazó cualquier tipo de presión para designar a los ministros que integrarán el gabinete que asumirá el prime-ro de enero próximo, Lula sostuvo que "no es humano que haya tantas personas pasando tantas privaciones". Antiguos compañeros de ruta del líder del Partido de los Trabajadores empezaron a desempolvar los reclamos que creen más urgentes.

 
Lula rechaza cualquier posibilidad de presiones para designar a quienes lo acompañarán en su gobierno.
San Pablo- El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que "voy a cuidar de los pobres como su fuesen mis hijos", y que será él quien designará, "sin ceder a ninguna presión", a sus ministros y secretarios.
"La designación de los ministros es una cuestión personal; una cuestión mía. Ningún diario, ningún canal de TV, ninguna radio va a nombrar ministro, o sea yo los voy a nombrar en el momento que considere adecuado", sostuvo enfáticamente, con lo que rechazó las presiones, fundamentalmente de los mercados para que anticipe los nombres de su equipo económico.
Emocionado frente a tantos besos y saludos, Lula prometió "cuidar de los pobres como si fuesen mis hijos. No es humano que haya personas pasando tantas privaciones".
Con estas palabras Lula pareció vincularse al ex presidente Getulio Vargas, figura central de la política brasileña entre 1930 y 1954, quien pasó a la historia como "el padre de los pobres".
Vargas es considerado un populista e impulsor de la industrialización brasileña y tiene muchos admiradores dentro del Partido de los Trabajadores.
Lula da Silva ya definió que su prioridad en el gobierno será "acabar con el hambre" en su país, que afecta, según sus cuentas a 44 millones de los 170 millones de habitantes.
El incremento del salario mínimo y la legalización de asentamientos rurales irregulares surgieron como los primeros reclamos que Lula da Silva, deberá atender incluso antes de asumir el poder el 1 de enero.
Las reivindicaciones partieron de antiguos compañeros de lucha del mandatario electo, en un caso reclamando atender a 100.000 familias campesinas y en el otro recuperar la pérdida por inflación en el salario mínimo en discusión.
Lula da Silva, un ex líder sindical que sostuvo un discurso socialista radical en el pasado, moderó sus posiciones para ganar las elecciones del domingo, prometiendo estabilidad económica y respetar los compromisos externos del país, pero a la vez atender los reclamos de los estratos más necesitados.
Durante la campaña, Lula defendió un reajuste del salario mínimo gradual. Pero ayer, ante la presión de parte de la que será la oposición al ex sindicalista para un rápido incremento del salario mínimo, el secretario general del PT, Luiz Dolci, dijo que el mínimo en el gobierno de Lula sería un "salario realísticamente posible, dentro de las disponibilidades financieras del país".
El problema en materia salarial es que todo reajuste de la remuneración mínima obliga al Estado a incrementar automáticamente las pensiones, lo cual significa mayor erogación presupuestaria, incompatible con las metas de superávit fiscal que el Lula moderado prometió respetar.
"El aumento del mínimo fue siempre una reivindicación del PT y todos los partidos de izquierda. No sé de dónde salió este fardo de austeridad fiscal con el que vienen", dijo a periodistas el diputado Sergio Miranda, del Partido Comunista, un tradicional aliado de Lula que llamó a elegirlo. (Télam/Reuters)

Advertencia sobre el ALCA

QUITO, Ecuador- Bra-sil advirtió que podría no incorporarse nunca a una zona de libre comercio de las Américas, aun cuando va a dirigir, junto con Estados Unidos, las conversaciones para constituir el bloque comercial de 34 países en el 2005. En vísperas de que se inicie hoy la cumbre para dar un nuevo impulso al plan de crear un Area de Libre Comercio de las Américas, el canciller de Brasil, Celso Lafer, acusó a Estados Unidos de amenazar con dividir las conversaciones a través de acuerdos bilaterales con otras naciones americanas.
"Sólo ellos (Estados Unidos) están haciendo acuerdos bilaterales ... lo que podría resultar en la división del proceso de negociación", dijo Lafer. "Alguna vez dije que para nosotros el ALCA es una opción, no un destino ... Si no existe una reciprocidad profunda, entonces Brasil merece el derecho de no firmar el ALCA", agregó.
Sus duros comentarios se produjeron justo antes de que ministros de Comercio de todo el hemisferio occidental lleguen a-quí para hablar sobre el ALCA. Los analistas po-nen en duda el valor de un acuerdo sin Brasil, que representa poco menos de la mitad de la producción económica de América del Sur. (Reuters)

     
     
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