Domingo 1 de septiembre de 2002
 

Alarma la violencia en el interior de las familias
 

Aportan debate para capacitar a profesionales. Desnudan los típicos mitos en la problemática.

  ROCA(AR).- El maltrato infantil es uno de los temas más delicados para tratar por los profesionales sociales. Así lo reconocen ellos mismos. No solo por el cuidado con que debe ser tratada la víctima sino también por el victimario. Lourdes Molina, jefa del Departamento de "Capacitación y tratamiento de la violencia familiar, maltrato infantil y abuso sexual" del Consejo Nacional de la Niñez, Adolescencia y la Familia estuvo en Roca coordinando las jornadas de "Maltrato infanto - juvenil" destinado a los profesionales que se dedican a tratar esta problemática y aportó algunos elementos valiosos para la discusión.
En una entrevista con "Río Negro" la profesional explicó que es básico y urgente que todas las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales conformen redes para colaborar mutuamente, ahorrar recursos y evitar que la víctima tenga que estar circulando por las diferentes instituciones que "hacen más terrible el sufrimiento por el que está pasando".
Lourdes Molina si bien se dedica a la capacitación nunca ha abandonado la práctica porque, según sus propias palabras, desde ese lugar puede repensar el campo teórico y pararse a capacitar a sus pares.
Una de las primeras cuestiones que se abordaron en las jornadas fueron las creencias y los mitos con los que se abordan los casos de violencia familiar.
- ¿Cuáles son esas creencias y mitos que aparecen con frecuencia?
Uno de los ejemplos de creencias erróneas es pensar que los casos de maltrato infantil intrafamiliar son escasos e infrecuentes. No es así: no son escasos ni infrecuentes. De hecho, la mayor cantidad de maltratos se dan en el interior de las familias. Alarma.
- ¿Puede ser considerado un mito la afirmación de que a mayor desempleo o pobreza hay mayor violencia en la familias?
- Hay que tener mucho cuidado con esa afirmación porque encierra una trampa: asociar que las familias pobres son las que maltratan. Las familias pobres, cuando maltratan, no lo hacen por la pobreza. Es verdad que la pobreza puede dar un contexto de mayor estrés y vulnerabilidad. Pero no se puede negar que existe una gran cantidad de maltratadores graves, de hecho los más graves, asociados a las clases sociales medias y altas.
Otro de los errores frecuentes es que se piensa que a menor educación hay más maltrato. Esto es un error porque responde a otros patrones. Esto hay que remarcarlo muy bien, porque sino parece que las políticas de Estado están basadas en controlar a las familias pobres, pero en realidad lo que hay que hacer es ayudarlas. Sin duda, cuando hay más pobreza hay mayor riesgo y mayor vulnerabilidad. Todos tenemos un límite y cuando todos nos llevan a ese extremo podemos empezar a actuar inconscientemente de forma violenta. Algunos tienen un límite muy pequeño y otros poseen más recursos. Es responsabilidad del Estado proveer eso recursos.

"La necesidad de repensar la práctica"

ROCA(AR).- Las jornadas sobre maltrato infantil realizadas en Roca permitieron el encuentro de los diferentes profesionales que se dedican a tratar esta problemática.
Lourdes Molina, la principal capacitadora, afirmó que "hubo una reflexión crítica en el grupo de participantes y también hay una necesidad y una voluntad de repensar la práctica".
También señaló la necesidad de los profesionales que trabajan en esta delicadas tareas de contar con espacios para pensar sus prácticas cotidianas porque debido a la sobrecarga de trabajo muchas veces no se puede evaluar lo realizado.
Por este motivo, Molina, consideró como muy favorables la jornada intensivas realizadas en el salón de conferencias de la Ciudad de las Artes, donde los profesionales pudieron discutir y decir lo que les pasa.
"Tenemos previsto realizar una segunda instancia para que cada uno de los participantes hablen de la utilización de los tres protocolos que presentamos para evaluar los casos de maltrato infantil en forma global", explicó la profesional. El principal objetivo es que estas jornadas se traduzcan a prácticas concretas y avances en pro de brindar una mejor atención y soluciones a las víctimas de maltrato.
"Estamos condicionados por factores de vulnerabilidad pero no determinantes. Si no, no podríamos entender porque hay padres en condiciones extremas de pobreza que no maltratan a sus niños", dijo en un aparte Molina, al referirse a los niveles de extrema pobreza que afectan a amplias capas de la población argentina.

   
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