Sábado 7 de setiembre de 2002
 

El Fondo aprobó el "megacrédito" para el Brasil

 

El directorio aprobó el desembolso de 30.400 millones de dólares. Candidatos presidenciales, que habían apoyado el crédito, criticaron el cambio de condiciones: habrá más ajuste.

  WASHINGTON (ANSA/ AFP) - El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó ayer la concesión de un préstamo stand-by por 30.400 millones de dólares solicitado por el gobierno de Brasil, con la intención de "apoyar el programa económico y financiero del país hasta diciembre del 2003", anunció un portavoz del organismo.
El préstamo a 15 meses es el mayor crédito jamás otorgado por la institución a un país en crisis .
Según el vocero, "la aprobación del crédito abre el camino para el retiro inmediato de hasta 3.000 millones de dólares" por parte del gobierno brasileño. "Una segunda extracción de hasta 3.000 millones estará disponible cuando se complete la primera revisión" del programa con Brasil, que está prevista "para antes de fines del 2002", continuó.
"El resto del crédito -agregó- estará disponible en cuatro tramos hasta el 2003, siguiendo la conclusión de las revisiones y la observación de criterios relevantes de la performance" de la economía brasileña bajo el programa acordado con el Fondo.
Este préstamo stand-by, el mayor de su tipo, reemplaza un crédito similar que había sido acordado con Brasilia en setiembre de 2001. Unos 10.100 millones del crédito aprobado ayer para Brasil, informó el vocero del FMI, se concretó a través del programa Supplemental Reserve Facility (SRF).
El multimillonario rescate compromete al futuro gobierno que salga de las urnas en las elecciones generales de octubre a que continúe la política macroeconómica y de reformas liberales implementada en los ocho años de gobierno de Cardoso, así como al cumplimiento del servicio de la deuda de 258.000 millones de dólares.

Críticas al nuevo ajuste

Pero no todo fueron buenas noticias. Los candidatos presidenciales de la oposición brasileña cambiaron el tono y criticaron el acuerdo con el FMI, porque incluye un ajuste más severo del que se había estimado y se extenderá a los primeros seis meses del próximo gobierno.
La principal crítica de la oposición es que los términos del memorando con el FMI, divulgados ayer, son diferentes a los que el presidente Fernando Henrique Cardoso les comunicó a los candidatos al recibirlos, el 19 de agosto, para pedirles un aval al acuerdo que liberó 30.000 millones de dólares a Brasil.
El acuerdo, tal como fue anunciado ahora, prevé un superávit fiscal de 3,88 del producto interno bruto (PIB) por ciento para este año, frente al 3,75 que Cardoso les mencionó a los candidatos, lo que extiende los recortes de gastos a los primeros seis meses del próximo gobierno, que asumirá el 1 de enero.
La nueva meta exigirá una "poda" de 600 millones de dólares adicionales y forzará al próximo gobierno, según cálculos opositores, a lograr en el primer semestre de 2003 un superávit primario un 8,65% superior al que el gobierno de Cardoso registró en el primer semestre de este año.
"No fuimos informados. Me sorprendió la noticia", dijo el candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inacio Lula da Silva, para quien "el peligro es que el gobierno esté en un final de fiesta, dejando que sucedan las cosas". El economista Guido Mantega, uno de los principales asesores de Lula, advirtió que el aumento del superávit acordado para este año afectará las inversiones del próximo gobierno. "La cuenta la pagará la próxima gestión", explicó.
El otro candidato opositor con chances, Ciro Gomes, que pelea el segundo lugar en las encuestas con el oficialista José Serra, fue aun más duro. Para Gomes, "la democracia brasileña está en observación" .
"Estoy inquieto con esto, las condiciones están quedando profundamente desequilibradas", afirmó Gomes, que adelantó que tratará de conversar del tema con Lula y con el otro candidato opositor, el ex gobernador de Río de Janeiro, Anthony Garotinho.

Subió el dólar y bajó la Bolsa

El dólar volvió a subir ayer pese al anuncio oficial del Fondo Monetario Internacional (FMI) de un préstamo stand-by por 30.400 millones y el retiro autorizado para este año de 3.000 millones de dólares.
El anunció al menos logró reducir el alza a 0,16% y el dólar cerró cotizado a 3,160 y 3,157 la venta y compra, respectivamente. El índice Bovespa de la Bolsa de San Pablo había comenzado muy activo y con "buen humor" a decir de los especialistas, pero al cierre de la jornada bajó levemente 0,07%, a 9.716 puntos.
En una semana de fuertes presiones, azuzada por los rumores de ataque de Estados Unidos a Irak, el dólar acumuló alza de 4,98 % y de 36,37 por ciento en lo que va del año.
Además del apoyo del FMI al programa económico y financiero hasta diciembre del 2003, el Banco Central vendió 319 millones de dólares en títulos, con lo cual financió el 53% de las deudas de empresas que vencen en septiembre. El flujo de capitales a la banca privada redujo la presión sobre el dólar, al igual que nuevos rumores de que el favorito del mercado, José Serra, habría subido en los sondeos.

México renunció al TIAR por "obsoleto"

Mexico (Télam-SNI).- México renunció ayer al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) bajo el argumento de que está obsoleto y en su lugar propuso trabajar en un nuevo esquema civil de seguridad hemisférica que combata potenciales "amenazas de corte militar".
En un comunicado, la cancillería mexicana explicó que junto con la "lucha frontal contra el terrorismo" y acciones concertadas frente a crisis económicas México "buscará privilegiar un enfoque multidimensional de la seguridad".
"Igualmente, en ese enfoque se deberá contemplar una articulación moderna y actualizada de respuestas a las amenazas de corte militar", dijo el comunicado. La nota destacó la necesidad de superar la pobreza extrema, la salud pública frente a pandemias y la prevención de desastres naturales.
El gobierno de Vicente Fox propone trabajar en un nuevo esquema civil de seguridad hemisférica que combata flagelos sociales y cree una forma de respuesta moderna a potenciales "amenazas de corte militar".El retiro mexicano del TIAR ocurrió a cinco días del primer aniversario de los atentados del 11 de setiembre en Estados Unidos, el socio comercial y aliado político y estratégico más importante de México. La Cancillería precisó que con base a los estatutos del TIAR, firmado en 1947 en el marco de la OEA, el tratado "dejará de ser aplicable a México transcurridos dos años a partir de esta fecha".
Argumentó que era necesario contar con "una estructura de seguridad multidimensional y moderna, que responda a las necesidades efectivas del hemisferio americano".

Un gesto significativo

El gobierno de México activó una cuenta regresiva que puede enterrar al polémico TIAR -una reliquia de la Guerra Fría.
El presidente Vicente Fox había manifestado al asumir que la región no necesita ya una alianza militar, pues sus mayores adversarios eran el atraso económico y la pobreza.
Sin embargo los ataques terroristas en EE.UU el 11 de septiembre sepultaron las palabras del mandatario mexicano y le dieron nueva vida al pacto interamericano de defensa, que volvió a ser invocado, a pedido del presidente George W. Bush, en apoyo a EE.UU. y su guerra contra el terrorismo.
La renuncia al pacto -que considera que un ataque contra un país miembro es una agresión contra el resto de países, similar al de la OTAN- es hecho significativo a escasos días de que EE.UU conmemore los ataques, que desataron una cruzada global antiterrorista.

     
     
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