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Martes 3 de setiembre de 2002 | |
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Sampras desató el júbilo en Flushing Meadows |
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El chileno Fernando González sorprendió al español Ferrero |
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| Pete Sampras demostró una vez más en el Abierto de Tenis de Estados Unidos que aún hay que contar con él, derrotando por 7-6 (7-4), 4-6, 7-6 (7-3), 3-6 y 6-4 al británico Greg Rusedski en un partido que llevó al delirio del público en Flushing Meadows. Sampras, ganó cuatro veces este torneo y disputó la final en los últimos dos años. Pero su decadencia de los últimos tiempos -no gana un torneo desde Wimbledon 2000- hizo crecer las sospechas de que su tiempo se había acabado. Pero a los 31 años Sampras amenaza con un nuevo golpe en el que es uno de sus torneos preferidos y ayer, tras tres horas y 15 minutos de un emocionante partido en la cancha central ante Rusedski, apretó el puño, hizo girar el brazo y gritó su euforia frente a las cámaras de televisión. Sampras buscará los cuartos de final ante el alemán Tommy Haas, vencedor del sueco Thomas Enqvist por 6-4, 3-6, 3-6, 6-4 y 6-4. En tanto, el chileno Fernando González sorprendió al español Juan Carlos Ferrero al vencerlo por 6-4, 6-4 y 6-4, en una repetición de la final juvenil de Roland Garros de 1998, y logrando el pase a octavos de final. González, que ya ganó en aquella ocasión a Ferrero en París, igualó de esta forma su mejor resultado en un torneo de Gran Slam, después alcanzar también los octavos de final este año en el Abierto de Australia. El chileno jugará en octavos de final contra el vencedor del partido que disputaban anoche Guillermo Coria y el francés Arnaud Clement. Por su parte, el brasileño Gustavo Kuerten se clasificó para octavos de final al vencer al chileno Nicolás Massú, que abandonó por una lesión muscular en el muslo derecho, cuando el marcador era favorable al triple ganador de Roland Garros por 6-1, 5-4. El partido, que se había suspendido el domingo debido a la lluvia después de que el brasileño hubiera ganado el primer set por 6-1, se inició ayer con más de siete horas de retraso por la misma razón y duró 1 hora y 14 minutos. Por su parte, Lindsay Davenport, una de las principales rivales de las hermanas Williams, demostró ayer estar recuperada de su lesión y se clasificó con facilidad para cuartos de final al vencer a la italiana Silvia Farina por 6-3 y 6-1. (AFP y DPA). |
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