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Sábado 7 de setiembre de 2002 | |
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La cara oscura de Robin Williams |
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Cansado de que lo encasillen en los papeles de bueno y también de ser ignorado por la Academia de Hollywood, Robin Williams dio un giro en sus elecciones y presenta personajes más oscuros en "Insomnia" y "One Hour Photo". |
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| Deauville, Francia, (Télam-SNI).- Actor popular y gran comediante, Robin Williams revela un aspecto inesperado de su personalidad interpretando a personajes inquietantes en dos películas presentadas en el 28 Festival de Cine Norteamericano de Deauville, en Francia, "Insomnia", de Christopher Nolan y "One Hour Photo", de Mark Romanek. Williams, natural de Chicago, de 51 años, es ante todo uno de los cómicos norteamericanos más populares de su generación. Sus proezas en el "one-man show" le valieron en los años 70 ser contratado para una popular serie de televisión. El séptimo arte no podía ignorar a este alumno de la Julliard School de Nueva York que debutó en la pantalla grande en 1980 en el "Popeye" de Robert Altman. Fue después el acelerado locutor de "Good Morning Vietnam", de Barry Levinson (1988), el profesor humanista de "La sociedad de los poetas muertos", de Peter Weir (1989), el padre disfrazado de mujer de "Mrs Doubtfire", de Chris Columbus (1993), entre otros roles que le aportaron popularidad y lo convirtieron en un factor de éxito comercial seguro para las películas. Quizá sea porque pese a su talento no logró ser laureado hasta ahora con un Oscar que Williams rompe con su tradición de personajes desbordantes de bondad y se mete en la piel de antihéroes mucho más complejos. En "Insomnia", de Christopher Nolan, el mismo de "Memento", encarna a Walter Finch, autor de novelas policiales al que un policía (Al Pacino) considera sospechoso de ser un sórdido asesino. "Es apasionante interpretar a un hombre tan despreciable, que te incita a explorar las zonas más oscuras de tu personalidad, la seducción del mal o su trivialidad", explicó en la ficha de prensa el actor, que no pudo viajar a Deauville. En "One Hour Photo", Williams se desliza por los meandros de la banalidad al encarnar a Sy Parrish, empleado del sector de revelado de fotos en serie de un gran supermercado. Solterón solitario de vida desesperantemente aburrida, Sy se construye una existencia a través de la vida de los otros, que contempla en las fotos robadas. "Estoy encantado de que me hayan propuesto este rol, después de tanto oir decir que sólo interpreto personajes de bueno". Para poder participar en esta película, Robin Williams aceptó cobrar la "tarifa sindical". "Todo el rodaje ha costado apenas más caro que el sueldo habitual de Robin", explicó en conferencia de prensa el director Mark Romanek al presentar su película en el Festival. Aunque estos papeles le han valido elogios a los que hasta ahora no estaba habituado, el actor no cuenta convertirlos en su especialidad. "La ventaja de interpretar personajes turbios es que el público te pide menos autógrafos, pero no por ello me voy a limitar en el futuro a hacer papeles de malo. La mayoría de los animales tienen un mecanismno de defensa, el mío es la comedia", dijo Williams en una entrevista. |
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