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Miércoles 28 de agosto de 2002 | |
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Final feliz para jóvenes perdidos en el bosque Llao Llao |
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Avisaron por teléfono celular y los rescataron después de varias horas; sólo se mojaron un poco |
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| SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El frondoso bosque municipal Llao Llao volvió a sorprender a un improvisado grupo de excursionistas, que se internaron en la espesura poco antes de caer la tarde y perdieron de vista el sendero que habían recorrido en el viaje de ida. La providencial tenencia de un teléfono celular permitió que los muchachos se comunicaran con un familiar, y luego con la policía y los bomberos de Campanario, y la aventura terminó después de la medianoche, cuando el grupo de rescate los encontró, muy mojados pero juntos e ilesos. Al margen de la imprudencia que se pueda atribuir a los excursionistas, son muchos los que coinciden en que la señalización en los senderos del bosque Llao Llao es escasa, y fueron varias las familias que se extraviaron allí. El grupo integrado por Lucas Modenesi, Maximiliano Dardanelli, Wálter Romano y Víctor Samojla llegó en un automóvil al kilómetro 26 de la avenida Bustillo, aproximadamente a las 17 del sábado, y munidos de una linterna, un silbato y un equipo de mate se internaron en el sendero que se inicia allí. Bajo una llovizna persistente, el camino los fue llevando por un laberinto de cañas colihues, y así llegaron a la picada que asciende al cerro Llao Llao, un pequeño morro desde el cual se puede divisar parte del contorno del lago Nahuel Huapi. Cuando los jóvenes quisieron emprender el regreso la visibilidad era nula, y no pudieron encontrar las huellas que habían dejado. Por eso a las 20 utilizaron un teléfono celular para comunicarse con la esposa de uno de ellos, y la mujer pidió auxilio a la policía y a los bomberos del cerro Campanario. Poco después se sumó a la búsqueda el guardaparque Marcelo Rivas, y con el celular, el silbato y la sirena de la policía, rescatistas y extraviados fueron marcando referencias que posibilitaron el encuentro pasada la medianoche. Los jóvenes adujeron que no habían encontrado carteles indicadores cuando quisieron emprender el regreso, y que la lluvia había borrado las huellas que habían marcado con su paso. Salvo una importante mojadura y la inquietud por la experiencia sufrida, ningún excursionista resultó lesionado. Los frecuentes extravíos de personas inexpertas en los bosques y valles andinos motivaron que hace varios años la Comisión de Auxilio del Club Andino Bariloche (CAX) iniciara una campaña de prevención y señalización de la mayoría de los circuitos habituales para el trekking y las excursiones pedestres. De esta manera mermaron los perdidos en las sendas que conducen a los refugios de montaña y también en algunas travesías muy transitadas en épocas de verano. No obstante, los extravíos suelen ocurrir en general en lugares poco transitados y en gran medida con visitantes que no tienen experiencia ni equipo adecuado. "Siempre hay que salir temprano y finalizar el paseo antes que anochezca", sostienen los integrantes de la CAX. |
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