Jueves 1 de agosto de 2002 | |||
|
La crisis transformó a los cartones y papeles en material precioso |
||
De 10 ó 12 centavos el kilo, pasaron a cotizarse entre 45 y 50 centavos. Hasta pequeñas cargas, en carretilla, son ofrecidas a las papeleras de la región. |
|||
"Viene mucha gente, mucha nueva y otra que desde hace tiempo se dedica a la actividad", admitió Luciano Basso, directivo de la papelera Moldeados Argentinos Sociedad Anónima, ubicada en el Parque Industrial de Neuquén. En la planta, todos los días y a toda hora ingresan camiones, chatas y camionetas cargadas con el material. Con los valores que se manejan y a la vista de la situación, de la noche a la mañana los cartones se transformaron en mercadería preciosa. Y cada vez son más las personas que se encargan de la recolección, acopio y venta. Varios de los flamantes pequeños acopiadores cayeron de las filas de la cacheteada clase media argentina. En el barrio Alto Godoy, hay cartoneros expertos y gracias a esa actividad -desde hace más de cinco años- 320 chicos toman la leche a partir de las monedas que genera la venta del material (ver aparte). "Yo tengo un quiosco y estuve trabajando en la compra y venta de metales; en los últimos meses empecé con los cartones y los papeles de diarios que se los compro a los mismos muchachos que vendían metales", explicó el conductor de una camioneta que esperaba su turno en la báscula de la papelera. El hombre, oriundo de La Pampa, admitió que con la venta de cartones alcanza a cubrir los huecos abiertos con la caída de las ventas en su comercio. Basso comentó que la crisis hizo que "se limitara" lo que podría denominarse generación comercial de papel: Se vende menos, se abren menos cajas y hay menos cartón en las veredas, podría ser la secuencia. También, en los comercios donde mayor cantidad de papel se descarta hay por lo general algún empleado que se los reserva. Y juntando una cantidad más o menos razonable, de 100 kilogramos para arriba, los entrega en la papelera. "Nuestra política desde que abrimos es pagar lo mismo a los proveedores de grandes cantidades como a los que traen una camioneta, siempre y cuando no hablemos de cantidades que no sean muy pequeñas. No podemos hacer un cheque por 20 o 30 kilos de cartón", advirtió Basso. Es que, por cuestiones de seguridad, en la planta no se maneja efectivo. "No, no, no me saques fotos, sacale a otro", se excusaron ante el reportero gráfico de este diario un par de flamantes cartoneros que el martes recorrían el bajo neuquino en una camioneta F100 que supo de tiempos mejores. Lo mismo se escudaron otros colegas con el indisimulable pudor de sentirse en baja. En Moldeados Argentinos, el papel y el cartón se recicla para fabricar cajas para huevos y "packs" para embalar manzanas y peras. Es el único centro de recepción de Neuquén. El otro está en Cipolletti. Por eso, al Parque Industrial llegan camiones cargados desde otros puntos de Neuquén e incluso desde otras regiones del país. A pesar de que las dos plantas industriales -la neuquina y la cipoleña- nunca dejaron de funcionar, en la época de oro de la convertibilidad el material de empaque llegó a ser importado de Brasil. Era más conveniente. "Los precios varían según la demanda, como en todo, ahora está tendiendo a estabilizarse y es probable que baje, pero seguro que no vuelve a los niveles previos a la devaluación", explicó Basso. "Somos conscientes de la realidad y mantenemos el mismo precio para todos los proveedores pero nos es imposible pagar cantidades muy pequeñas", se lamentó el directivo. Es que hace un par de días, un hombre pretendió vender la carga de una carretilla. En una entidad religiosa los juntan para comprar leche NEUQUEN (AN).- Cartones por una copa de leche. En el barrio Alto Godoy, 320 chicos merendan con los fondos que genera la venta de cartones y diarios viejos que los vecinos acopian en la parroquia del "Santísimo Sacramento" de una entidad religiosa conocida como iglesia misionera de evangelización. Familias enteras buscan sustento en el cirujeo NEUQUEN (AN).- De día y de noche. De a pie, en chatas tiradas con caballo, en camionetas o camiones. Chicos, grandes, jóvenes y viejos. Familias enteras. Cartones, vidrios, metales, y comida para sustento propio o para el alimento de porcinos. El cirujeo exhibe hoy todas sus variantes en las calles de esta ciudad, lo mismo que en buena parte del país. |
|||
® Copyright Río Negro Online - All rights reserved
|
|||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación |
|||
|