Miércoles 14 de agosto de 2002
 

Cardoso busca un "pacto de transición" en Brasil

 

Se reunirá con todos los candidatos presidenciales. Intentan calmar a un mercado cada vez más turbulento.

  BRASILIA (ANSA) - El presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, se reunirá el lunes con los candidatos para las elecciones del 6 de octubre, en un intento por calmar las turbulencias financieras y evitar que la transición hacia el nuevo gobierno se salga de cauce.
El llamado se produjo en medio del agravamiento de la crisis de desconfianza en el país, con otra suba del dólar y el riesgo país, además de una baja en la Bolsa (ver aparte)
El objetivo de Cardoso es que cada uno de los candidatos, en especial los de oposición, que encabezan las encuestas de intención de voto, respalden el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), anunciado el miércoles pasado.
Planalto, la sede del gobierno, confirmó ayer que las reuniones serán por separado el lunes, durarán una hora con cada uno de los candidatos, comenzando con Ciro Gomes a las 12 locales, luego Luiz Inacio Lula da Silva, Anthony Garotinho y finalmente con José Serra.
"Los candidatos tienen sus responsabilidades y me gustaría verlos asumiéndolas. Algunos ya lo hicieron, asumiendo esa responsabilidad ante el país. Es necesario que los candidatos tomen conciencia de lo que estamos haciendo y por qué y manifiesten su apoyo al país", dijo Cardoso.
El ministro de Economía, Pedro Malan, fue aún más preciso sobre lo que espera el gobierno del diálogo político, el primero al que convoca Cardoso en sus casi ocho años en el gobierno.
El ministro enumeró entre esos "compromisos" las metas de inflación y de superávit fiscal primario anual del 3,75% del PIB, acordado con el FMI hasta el 2005, y el pago de la deuda.
El socialista Luiz Inácio "Lula" Da Silva, quien encabeza las encuestas de intención de voto, aceptó la invitación de Cardoso ya que, sostuvo, "no tengo ningún problema en conversar con él. Sólo un irresponsable no aceptaría la invitación del presidente de la República".
"Pero esa conversación sólo tendría sentido si hubiera una pauta establecida. Nosotros ya asumimos los compromisos de honrar los contratos en junio, en la Carta al Pueblo Brasileño. Más que eso nadie nos puede exigir", advirtió.
Lula Da Silva opinó que la causa de la crisis financiera es "la vulnerabilidad de la economía. Eso, ni el acuerdo con el FMI lo resuelve. La única solución es el crecimiento de la producción".
También Ciro Gomes, del opositor Frente Laborista, aceptó la invitación presidencial al diálogo político. "Participaré sin ninguna clase de reservas. Lo único que contagia es la varicela", ironizó Gomes, segundo en las encuestas.

Gomes pone a Chile de ejemplo

SAN PABLO (ANSA) - El candidato a la presidencia de Brasil por el Frente Trabalhista (Laborista), Ciro Gomes, elogió la economía chilena, "la única que ha sobrevivido a las turbulencias", y descartó la posibilidad de imponer restricciones bancarias ("corralito") porque "los depósitos de los brasileños son intocables".
Ese es el ejemplo que piensa seguir Gomes, uno de los favoritos detrás de Luiz Inacio Lula da Silva para llegar al poder en las elecciones del 6 de octubre.
"¿Qué es lo que ha hecho Chile para llegar a esos niveles?", se preguntó Gomes, y en seguida respondió que "es el crecimiento de la economía y el aumento del nivel de ahorro interno".

Dólar y riesgo país siguen en alza

San Pablo (Télam).- La crisis financiera volvió a castigar ayer a Brasil, causando nuevas subas en el dólar y el riesgo país, mientras la calificadora de riesgo Moody"s decidió bajar la nota a la deuda pública en divisas del país, pese al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 30 mil millones de dólares anunciado al semana pasada, y las ayudas de otros organismos que se sucedieron en los últimos días.
El billete estadounidense, que ayer había subido a 3,11 reales por unidad, se colocó ayer en 3,165 reales, mientras que el riesgo país se disparó 63 puntos básicos, a 2.284 unidades.
En la bolsa paulista, que perdió 2,88 por ciento, los más castigados fueron los papeles de los principales bancos, que serían los primeros perdedores si se cumple el vaticinio-temor de los analistas del mercado, acerca de una posible declaración de default del gobierno que surja de las próximas elecciones.
La que se hizo eco de ese miedo fue la calificadora Moody"s, que rebajó la nota de los títulos de deuda en divisas de B1 a B2, y advirtió además que estima "difícil" que el futuro gobierno pueda cumplir con los requisitos que puso el FMI para el envío de los 30 mil millones.
En tanto, el titular del Banco Central, Arminio Fraga, adelantó que el gobierno usará dólares de sus reservas para abrir líneas de crédito a las empresas que dejaron de calificar para los préstamos de bancos comerciales, a raíz de la devaluación del real.
"El diseño de la operación aún no fue cerrado, pero será concluido en cuestión de días", dijo Fraga. Desde mayo, cuando el nerviosismo de los mercados comenzó a presionar el dólar y el riesgo país al alza, los bancos redujeron sus líneas crediticias en divisas, impidiendo incluso que las grandes firmas refinancien sus pasivos externos.
Fraga no precisó cuánto dinero de las reservas se utilizaría, pero dio una pista al señalar que un año atrás las líneas de crédito para empresas sumaban 16.000 millones de dólares y hoy cayeron a 13.000, con lo cual la suma podría ser la necesaria para cubrir esa brecha.

     
     
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