Brasil: el candidato de Cardoso no logra hacer pie
Serra, el favorito de los mercados, sigue cayendo en las encuestas y se rumorea su renuncia. Comienza una campaña feroz.
Las dificultades de Serra son tantas que preocupan al presidente Fernando Henrique Cardoso y provocaron el viernes fuertes rumores de que podría abandonar su postulación.
Los rumores sobre la renuncia de Serra, el favorito de los inversores y los mercados, tuvieron un efecto más poderoso que los 30.000 millones de dólares del préstamo del FMI y provocaron un alza del 3,69 por ciento en el dólar, que cerró por encima de los tres reales, a 3,02.
El candidato, que se encontraba haciendo campaña en el estado de Pernambuco, en el nordeste del país, criticó las versiones, que a su juicio "son una falta de respeto", y telefoneó a Cardoso para desmentirlas. El presidente le pidió "calma y tranquilidad".
Serra, ex ministro de Salud de Cardoso, no logra recuperarse en las encuestas, en las que ya pelea el último lugar con el ex gobernador de Río de Janeiro, Anthony Garotinho, lejos de los líderes, los opositores Luiz Inacio Lula de Silva y Ciro Gomes.
La última pesquisa, divulgada el viernes, muestra a Lula, del Partido de los Trabajadores (PT), con 33 por ciento de los votos, seguido por Gomes, del Frente Laborista, con 27. Serra está en un lejano 11 por ciento, en un empate técnico con Garotinho.
Según los encuestadores, Serra, que cayó tres puntos respecto a la medición anterior, es el único candidato que se movió más allá de los márgenes de error. La caída provocó desconcierto en las filas de Serra. "No hay una explicación plausible", se quejó Roberto Vieira da Costa, uno de los coordinadores de su campaña.
A las dificultades en las encuestas, a Serra se le suman las continuas defecciones de líderes regionales de la alianza oficialista, que cada vez más ofrecen su apoyo a Ciro Gomes.
El viernes, el ex gobernador del Estado nordestino de Ceará, Tasso Jereissati, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) de Cardoso y Serra abrió un comité de campaña para apoyar su candidatura a senador y la de Ciro Gomes a la presidencia.
Serra y sus colaboradores han decidido concentrar su campaña en atacar a Ciro Gomes, al que considera el rival a vencer para poder llegar a la segunda vuelta, en la que Lula ya tiene su lugar asegurado, según todas las proyecciones. "Ciro es fanático por el dólar, quiere ver la cotización subir", disparó Serra el viernes, ante los reparos puestos por el candidato del Frente Laborista al último acuerdo con el FMI, al que calificó de "desastre".
Sus colaboradores, entre tanto, culparon al Frente Laborista de Gomes por las versiones de renuncia. "¿A quién le interesa algo sórdido como eso?, se preguntó el presidente del PSDB, José Aníbal. Sólo a la banda de la campaña sucia y a los especuladores", acusó.
Pero Lula se sabe ya en la primera vuelta, y no quiere ser parte de una campaña negativa. Duda le ha forjado una imagen mediática "humana", con notas biográficas y spots televisivos emotivos, en uno de los cuales incluso lloró al recordar las privaciones de su niñez y el sufrimiento de su madre. El próximo 20, Serra comenzará a desandar el tramo decisivo para su campaña, cuando empiece a utilizar el espacio televisivo gratuito, para muchos analistas la última esperanza que le queda. Todo indica que se concentrará en atacar a Gomes.
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