Domingo 4 de agosto de 2002
 

Agujero negro

 

Por Arnaldo Paganetti

  El desarrollo de los acontecimientos políticos y sociales en la Argentina - que rebotan y se expanden peligrosamente hacia Uruguay y Brasil por más que los genios norteamericanos los consideren inocuos y acotados -, se está pareciendo mucho al fenómeno espacial del agujero negro. El país se asemeja, así, a un hoyo sin fondo donde van quedando atrapadas las energías de una manera tan densa que no pueden desplegarse. Ni siquiera para provocar un hálito de esperanza.
A simple vista nada se ve: las fuerzas, supuestamente renovadoras, van cayendo en ese pozo sin pena ni gloria, desactivando un gran potencial energético para desaliento del conjunto.
Los ejemplos abundan. Puede tomarse, por caso, la experiencia que intentan los partidos provinciales detrás de la constitución de una franja de centro derecha que no termina de alumbrar porqué no hay quien levante la bandera detrás de la cual desfile la mayoría.
El líder aprobado en el pasado por el mercado global, Carlos Menem, perdió crédito al ser juzgado como uno de los principales causantes de la actual negritud y, para colmo, acaba de reconocer una cuenta en Suiza, cuya existencia vino negando durante 16 años.
A Menem (no es el único, por supuesto), le cabe el sayo descripto en uno de los aguafuertes de Roberto Arlt, de cuya muerte se cumplieron 60 años el pasado 26 de julio. Escribió el genial escritor: "Cierto es que quiero robar, pero ¿quién no quiere robar? Díganme ustedes quién es el desfachatado que en estos momentos de confusión no quiere robar. Si ese hombre honrado existe, yo me dejo crucificar".
Uno de los hombres con aptitud técnica y moral para pivotear en ese andarivel, el ex ministro Ricardo López Murphy, trabaja con optimismo detrás de un programa aglutinante y niega que ese agujero sea la sepultura de los bienintencionados. "Hay un vacío que hay que llenar. Son muchos los que olfatean eso, entre ellos de manera inteligente lo hace (Jorge) Sobisch, y yo me inclino a dar la sorpresa por ese lado", expresa en la intimidad, abjurando de la teoría física que concluye que lo que entra allí termina desapareciendo.
Los que se dicen provinciales, empero, no constituyen una novedad. Algunos supieron dar sustento ideológico a dictaduras militares, también culpables del actual desquicio económico y humano, o giraron alrededor de Menem, como lo hizo el neuquino Sobisch, quien hasta hace muy poco había comprometido su adhesión al neomenemista Carlos Reutemann, antes del paso al costado de éste asqueado por un misterio insondable que habita en el mismo tugurio oscuro.
López Murphy reconoció que la salida de Reutemann, le amplió el espectro a él y a otros con fuertes afinidades con los países moderados y exitosos de la urbe capitalista. ¿Y si vuelve "Lole" a caballo del "Operativo Clamor"? "Nos achicaríamos", se sincera el radical itinerante, debido a que el alfonsinismo domina la estructura de la UCR y se entiende mejor con Eduardo Duhalde, quien hoy apuesta fuerte por José Manuel De la Sota, el candidato todavía en gateras. Las especulaciones, alimentadas por delfines como Oscar Lamberto o por el empresario Francisco de Narváez, chocan con los inmutables negativas del ex corredor de Fórmula 1 que, como todos, presencia la disposición de Estados Unidos a ayudar a varios países del Cono Sur. Pero no a una Argentina que deriva el dinero a Suiza, como hizo azuzó el próximo visitante Paul O´Neill, en obvia aunque no limitante referencia a Menem o a la Nación europea. Abundan los fondos argentinos en paraísos fiscales. ¿O no?, razonaría Arlt.
Mientras crece en intensidad la lucha salvaje entre Menem y Duhalde, al centroizquierda no le va mejor. El ex vicepresidente Carlos "Chacho" Alvarez (a punto de dar testimonio en un libro sobre la experiencia que vivió en un Senado con corruptela institucionalizada) le hace sugerencias a la postulante del ARI, "Lilita" Carrió, a través de su esposa Liliana Chernajovsky.
Básicamente, el todavía enclaustrado (y bajoneado) "Chacho", le sugirió armar equipos y gente para una gestión de gobierno homogénea y eficiente, e ir dejando atrás la exhibición como mera denunciante. Eso ya no basta, le dijo. "Podes perder con alguien que valga la pena perder. Con Reutemann te conviene, si juntás un 25/30 por ciento y que quedas con una base electoral sólida para el 2007, pero caer ante Menem sería un bajón. En ese caso, tendrías que jugarte a muerte", aconsejó el segundón del fracasado Fernando de la Rúa.
Carrió buscará una estructura legislativa fuerte, con sus desbordes místicos, a los que en su entorno señalan meditados para captar a una vasto sector popular creyente.
También evalúa la posibilidad de correrse y dejarle el lugar al santacruceño Néstor Kirchner, pero son muchos los que desconfían del justicialista. "Chacho" Alvarez es cauto al respecto. "Fijate en lo que me pasó a mí. No fuerces las alianzas. No entregues el mando. Comanda el lote progresista, sin fisuras".
Los días por llegar vienen cargados de incógnitas y presagios de tumultos. O"Neill, "el hombre de la bolsa" de George Bush, viene cargado ("no hay una bala mágica apropiada para todos", advirtió) y dispuesto a concederle algo a Duhalde, siempre y cuando éste lo convenza de que garantiza reglas de juego claras para entregar el poder y que está haciendo lo posible para no caer en el pozo ciego donde no hay luz.


Arnaldo Paganetti
arnaldopaganetti@rionegro.com.ar

     
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación