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Viernes 9 de agosto de 2002 | |
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Robaron más de $ 10.000 en una empresa médica |
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Fue ayer a la madrugada en Neuquén. Actuaron tres ladrones armados, no utilizaron violencia y ni siquiera gritaron. Redujeron a cinco personas y se alzaron con el dinero en efectivo. |
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| NEUQUEN (AN)- Una empresa que brinda servicios de asistencia médica de urgencia fue asaltada ayer a la madrugada por tres delincuentes, que se alzaron con más de diez mil pesos sin golpear a nadie y casi sin levantar la voz. Para reducir a uno de los enfermeros les bastó con hacer el gesto típico de silencio llevándose el dedo índice a los labios, como en la clásica fotografía que antiguamente colgaba en las salas de espera de todos los hospitales. Claro que en la otra mano, el delincuente tenía un revólver listo para disparar. El asalto ocurrió ayer a la madrugada en la sede de la empresa Emergencia SRL, en Jujuy 667, en el macrocentro de esta capital. Según informaron fuentes de la empresa, a esa hora tres jóvenes golpearon con desesperación la puerta de ingreso y pidieron auxilio médico, argumentando que uno de ellos necesitaba ayuda. Apenas el enfermero que los atendió abrió la puerta, le apoyaron el frío caño de una pistola en la cabeza. Los tres asaltantes, que ocultaban parcialmente sus rostros con la solapa de sus camperas, ingresaron al vestíbulo y redujeron también a la recepcionista. Uno de ellos se dirigió hacia el fondo del local donde estaba otro de los enfermeros. A él lo redujo con un simple "shhh" y apuntándole con un arma. Luego otro de los asaltantes subió al piso superior donde descansaban, en un dormitorio, los dos médicos de guardia. A uno le apoyó el caño de la pistola en la cabeza para despertarlo. "Vestite, vamos abajo", les ordenó sin alzar la voz. Las cinco víctimas fueron conducidas bajo amenazas hasta la cocina, y obligadas a tirarse al piso boca abajo. Mientras uno de los ladrones las vigilaba, sus cómplices se dedicaron a revolver la oficina buscando dinero. Primero se hicieron de la caja chica, en la que había poco más de 100 pesos. Después de romper los cajones de algunos escritorios encontraron lo que buscaban: más de 10.000 pesos que estaban destinados al pago de proveedores. No se descarta que alguien les haya pasado el dato. Mientras cometían el asalto, sonó el teléfono pero impidieron que lo atendieran. Después de trinar con insistencia, quien llamaba cortó. Pero minutos después el aparato volvió a sonar. "Dejame atender, puede ser alguien que se está muriendo", intentó convencerlos uno de los médicos. Los ladrones tuvieron la misma actitud, e incluso cortaron el cable. También le sustrajeron los celulares a sus víctimas. Después condujeron a todos los rehenes hasta el piso superior y los encerraron en el baño, aunque sin llave. Y escaparon con la misma serenidad con la que se movieron durante todo el hecho. Según las fuentes consultadas por "Río Negro", los asaltantes eran "jóvenes, de menos de 25 años, muy seguros de lo que hacían. No recurrieron a la violencia ni a los insultos. Manejaron con profesionalismo la situación". Además del dinero y los celulares, se llevaron algunos efectos personales de los médicos. Es la primera vez que esta empresa sufre un asalto de estas características. "Cuatro veces nos robaron cosas de las ambulancias: equipos costosos, la radio, pero nunca se habían metido adentro", dijo la fuente. También indicó que la modalidad que utilizaron es preocupante. "¿Qué podemos hacer si alguien viene de noche a pedir ayuda urgente? Tenemos que abrirle la puerta, no hay otra", reflexionó el profesional consultado. |
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