En Bariloche faltan recursos, insumos e ideas

Los trabajadores presentaron un lapidario informe al intendente Icare.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En una nueva asamblea gremial el intendente Alberto Icare escuchó ayer un devastador informe acerca de las condiciones de trabajo y los recursos disponibles en cada área del municipio. La intención de los responsables de cada repartición fue advertir que no todo pasa por el incumplimiento salarial y que en las actuales condiciones la municipalidad no puede prestar los servicios más elementales.
También le reclamaron al intendente "directivas claras" y pusieron en evidencia las inequidades que se producen por las órdenes contradictorias y la "falta de coordinación entre los funcionarios políticos". Hoy el Soyem mantendrá abiertas todas las oficinas por la mañana y realizará retención de servicios entre las 12 y las 15.
Insuficiencias en el sistema de informatización contratado a Altec, falta de combustible, vehículos rotos, personal que trabaja sin seguro, falta de insumos en bromatología y en la perrera y largas demoras para conseguir una lámpara o una lata de pintura son algunas de las serias limitaciones que afectan a todas las áreas.
Icare escuchó la abrumadora descripción sin dar respuestas concretas. Sólo se mostró comprensivo de las dificultades y prometió una seguimiento "personal" de cada reclamo de suministros y su correspondiente autorización. Por una vez el discurso del Soyem dejó de lado el reclamo de los haberes adeudados (que ya acumula tres meses) y puso el acento en las condiciones laborales. Además de la falta de insumos se quejaron de que "no hay un plan de gobierno".
Icare intentó convencerlos de que a pesar de la crisis no se apartó de sus compromisos de campaña. "Algunos interpretarán que estoy a al deriva -dijo- pero yo tengo bien claro lo que quiero para adelante".
Sin embargo entre los trabajadores fueron mayoría los gestos de descreimiento, al igual que entre los concejales, que siguieron en silencio el intercambio. Uno de ellos, al salir de la asamblea, observó que "el gobierno está paralizado, sin reacción. En 50 días sólo envió al Concejo el proyecto de Emergencia Económica. Hay cientos de decisiones para tomar, pero no avanza con ninguna".
Una situación enojosa vivió el intendente cuando la jueza de Faltas se quejó de la dualidad de criterios respecto de la clausura que ella dispuso sobre el hotel Antártida. Mientras el intendente había decidido "no retroceder un centímetro" en esa sanción, el secretario de Turismo Hugo Cejas le pidió que "la frene hasta agosto" para no afectar la temporada turística. Algo parecido ocurrió con una carta documento para reclamarle a Camuzzi una rendición de 100 mil pesos que cobró por cuenta del municipio. A pesar de la anunciada "mano dura" con los deudores, el secretario de Hacienda Jorge Rojas se negó a firmar la intimación, de acuerdo a lo denunciado.
Pero el caso más preocupante es el del servicio de correo para distribuir las facturas de tasas. El contrato con la empresa privada que realizaba esa tarea está vencido y todavía no hubo decisión sobre su reemplazo. La empleada a cargo del sector denunció que tiene más de 30 mil boletas apiladas que vencen el mes próximo y nadie las reparte.
Otra fuente de ingresos es el área de fiscalización, que no tiene vehículo propio y los inspectores deben trabajar con los suyos. También surgió la queja por la falencia para cobrar el uso de espacios públicos y cartelería.

Foto: Cementerio de elefantes. El parque vial del municipio es obsoleto y la mayoría de sus maquinarias y vehículos deberían renovarse.