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VIEDMA
(AV)- IPPV-Casa Rionegrina disminuyó el monto de los créditos individuales
asignados para materiales y suspendió momentáneamente el otorgamiento
de préstamos para mano de obra. La morosidad en el pago en ocho años
de gestión alcanza a los cinco millones de pesos.
El titular de esos organismos, Jorge Ferreira, atribuyó esta restricción
a la existencia de altos coeficientes financieros en el mercado que
modificaron sustancialmente las variables en la adquisición de materiales.
Se estima que los incrementos de precios en los insumos de la construcción
promedian un 60 por ciento.
Explicó que lo único que "dejamos abierto son los microcréditos hasta
1.200 pesos que sigan facilitando pequeñas soluciones habitacionales,
y de paso se mantiene mínimamente la mano de obra en los rubros albañilería,
electricidad, gas y plomería". Estos microcréditos se deben devolver
en 24 cuotas fijas de 68 pesos.
El funcionario prometió que cuando se normalice la situación se podría
retomar el nivel de otorgamiento.
En esos ocho años se otorgaron unos 15.000 créditos -a razón de 2.000
anuales- que oscilaron entre los 500 y 15.000 pesos por beneficiario.
Estos préstamos reportaron no sólo el movimiento de todos los rubros
laborales sino también soluciones habitacionales para 60.000 personas.
Un 65 por ciento de la totalidad de la cartera crediticia fue otorgada
a privados.
Al no tener relación salarial con el Estado, a Casa le resulta difícil
recuperar el dinero del préstamo brindado a los particulares por cuanto
no existe un mecanismo aceitado como con los empleados públicos, a quienes
se les retiene por planilla de haberes.
Al respecto, Ferreira precisó que el principal bache de falta de pago
"lo tuvimos en los primeros meses del año y luego se recuperó llegando
la cartera al 80 por ciento de pagos.
Precisó que entre un 15 y 20 por ciento son "morosos" que "van pagando
de a poco en base a intimaciones" reconociendo paralelamente que un
5 por ciento de la cartera "la pasamos a incobrables" con lo cual la
morosidad alcanza a cinco millones".
El funcionario explicó que la morosidad se arrastra desde que prácticamente
comenzaron a otorgarse los créditos en ocho o nueve años de gestión.
En cuanto a las acciones que despliega el organismo para recuperar la
deuda consideró que "hay llamados permanentes, algunos vienen y convienen
planes de refinanciación" pero descartó acudir a la vía judicial dado
que "nosotros le damos a esta cartera un sentido de equidad social en
el que se atiende la situación de desocupación en algunos casos, y preferimos
premiar la voluntad de pago".
Casa sigue teniendo una demanda constante de este tipo de créditos,
ya que de acuerdo a una encuesta del organismo efectuada en esta capital,
Cipolletti, Bariloche y General Roca -sobre 400 casos-, determinó que
un 43,5 por ciento de los consultados se pronunció en favor de una necesidad
de ampliar y refaccionar la vivienda actual, contra 18,7 por ciento
de necesidades de cambio y un 37,9 por ciento de satisfacción de la
vivienda actual.
El IPPV y la intermediación
El IPPV está a la espera de un decreto
nacional que permita una actualización en los índices de la construcción,
lo cual, facilitará nuevos proyectos de factibilidad y de inversiones
en planes habitacionales. Así, definió Ferreira el compás de espera
del organismo provincial.
Con ese ajuste nacional, el funcionario precisó que el gobierno provincial
efectuará un reconocimiento a empresas. Por ahora, el organismo está
concluyendo el Plan 2000 ya que están en ejecución unas 700 viviendas
y faltan iniciar 266 más, aunque "a un ritmo más pausado como consecuencia
de la falta de parámetros".
En cuanto a las adjudicaciones de vivienda, el funcionario indicó que
se seguirá con otorgarlas a través de entidades intermedias y municipios.
Ferreira desestimó que se restrinjan el acceso con la intermediación
de otras organizaciones. "En definitiva le estamos entregando casas
a rionegrinos y a través de entidades -como sindicatos- transparentamos
el sistema de adjudicación porque siempre se le achacó al Estado de
que hacía una sospechosa intermediación". (AV)
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