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Jueves 11 de julio de 2002 | |
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Arriaga envió un presupuesto con fuerte ajuste |
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Una reducción del 12% en los gastos prevé el intendente de Cipolletti para este año. Influye una notable retracción de la obra pública. |
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| CIPOLLETTI (AC) - El intendente Julio Arriaga piensa gastar este año casi tres millones de pesos menos que en el 2001. En ese ahorro será fundamental el recorte en la obra pública y en el consumo telefónico, la publicidad y en la concesión de servicios públicos. Así surge del proyecto de presupuesto que ayer envió al Concejo Deliberante. En el mensaje de elevación, el jefe comunal destacó que se logró un recorte del 12% en los gastos en comparación con el ejecutado del año pasado, pero aclaró que la reducción sería del 20% si se quitara del presupuesto 2002 la amortización de la deuda del año anterior (unos 2,3 millones de pesos). El gobierno cipoleño proyecta no sólo una reducción en los gastos para este año; también cree que los recursos disminuirán en más de 700.000 pesos porque la tendencia a la baja de la recaudación es una realidad en todo el país. "Siendo conscientes de que no podemos dejar de brindar a los ciudadanos como mínimo la misma prestación de servicios que el año anterior es que ante la necesidad imperiosa de reducir el presupuesto de gastos, se ha optado por mantener la misma estructura de personal (con más el plantel necesario para el servicio municipalizado de la recolección de residuos) direccionando el ahorro a los rubros contratación de servicios, transferencias corrientes y sobre todo una disminución importante de la obra pública", les dijo Arriaga a los intendentes. Efectivamente la reducción de gastos es importante en la partida de servicios porque ya no se le debe pagar a una empresa privada por la recolección de residuos. Para este cometido, se gastarán este año 430.000 pesos, contra los 1.600.000 que habían sido presupuestados el año pasado. Pero como contrapartida, ha crecido el gasto en personal, esencialmente en el área de los contratados. El intendente anunció que continuará "apostando a la presión fiscal sobre aquellos contribuyentes cuya capacidad de pago no ameriten un atraso, manteniendo, como siempre, planes de pago especiales para los sectores más postergados de la comunidad". Para Arriaga, la contención del gasto adquiere una significación mayor en tiempos en que "los costos se han multiplicado hasta por cuatro veces". La partida "transferencias" se mantiene con una variación sumamente leve: es la que corresponde a la ayuda social en la ciudad, tanto en lo que hace a la inversión propia como a programas externos administrados por el municipio. El año pasado se habían proyectado obras públicas financiadas con recursos propios por casi dos millones de pesos. Para este año, el ajuste colocó ese mismo objetivo en apenas 788.000 pesos. Otro rubro que creció notablemente es "bienes de consumo". Aquí también debe influir la municipalización del servicio de recolección de residuos porque, independientemente de la inflación, crecen las previsiones de gastos para mantenimiento de maquinarias. Las autoridades económicas municipales adjudican el crecimiento en la amortización de la deuda al traslado de la deuda flotante del año pasado a este. Diciembre pasado cerró con obligaciones impagas con proveedores y con los empleados municipales (sueldos y aguinaldos). |
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