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Martes 2 de julio de 2002 | |
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Retiran muebles y herramientas de la firma Alto Valle |
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Los pocos trabajadores que quedan se quejan porque dicen que a este ritmo en pocos días se quedarán sin empleo. Necesitan las herramientas para reparar colectivos. |
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| CIPOLLETTI (AC).- Por orden de la Justicia, ayer se retiraron varias herramientas y muebles de lo que queda de la empresa de ómnibus Alto Valle, en Cipolletti. La bronca de los 40 empleados que aún permanecen en la firma se tradujo hasta en una advertencia: "nos están obligando a ser violentos". Los trabajadores, todos ellos con más de 20 años de antigüedad, recordaron que los dueños de la empresa se separaron hace unos años y "formaron" la empresa Pehuenche. "Se llevaron los mejores micros, el personal más nuevo, ningún tipo de deuda y dejaron a Alto Valle con el personal más antiguo y toda la deuda. Alto Valle entró en una convocatoria, después en una quiebra y por consiguiente se comenzó con el despido del personal". No tardaron en salir a retrucar desde la empresa Pehuenche para deslindar responsabilidades en este conflicto. "Si el síndico y la administradora judicial no están capacitados para llevar una empresa adelante es problema de ellos, no mío. Yo llevo mi empresa adelante no solamente la mía sino que ahora también estoy con La Cipoleña. Pehuenche y la familia Trasarti y Simonella invierten en la ciudad para trabajar no para `garcar` gente como se manejan estos tipos. Hace cuatro años que yo sigo con esta historia", expresó Juan Manuel Trasarti a LU19. Dijo que se tuvo "que comer" allanamientos en su casa para ver si tenía dinero en cuenta corriente. "La plata la tenemos en la empresa para dar trabajo y de comer a la gente no como estos vagos que no le dan de comer a nadie. Se la están robando, porque con la plata que ellos recaudan, yo le puedo demostrar que le pueden pagar el sueldo a los empleados y reparar las unidades", agregó. De los 100 empleados que había en Alto Valle, los trabajadores dijeron que se terminaron despidiendo a unos 60. El sábado fueron los últimos 10. "Tenían toda una vida acá adentro", cuestionó Edilberto Kissner, uno de los empleados. Las quejas no sólo se escucharon por la situación laboral sino también por algunas "amenazas" con armas de fuego que dicen haber recibido y denunciado algunos choferes. "Nosotros estamos trabajando por veinte pesos por día para mantener esto y para ver si alguien se hace cargo. No aguantamos más. Ya estamos seis meses sin sueldo. Estamos todos luchando parejo para ver si alguien nos da una solución", manifestaron. Dijeron que ayer "se llevaron un criket carro, una cortadora, una soldadora y todo lo que el taller necesita. Nos están desarmando el taller para no trabajar más. ¿Qué vamos a hacer sin herramientas?". Mencionaron que si siguen así "en cuestión de días" no podrán seguir trabajando con las únicas ocho unidades que les quedan. |
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