Duhalde adelantó las elecciones presidenciales

Acuciado por la crisis social y económica, el mandatario decidió achicar los plazos y entregar el poder antes de lo acordado en la Asamblea Legislativa que lo ungió en enero. Lo justificó en los avances alcanzados con el Fondo Monetario Internacional. Habrá internas abiertas simultáneas en todos los partidos, en noviembre. No se sabe si se renovarán el Congreso y las gobernaciones.

El presidente Eduardo Duhalde, anunció ayer el adelantamiento de los comicios presidenciales para marzo, en un intento de evitar correr la suerte de sus dos predecesores, que cayeron por una revuelta popular.
En su mensaje, Duhalde afir-mó que la inminencia de un a-cuerdo con el Fondo Monetario Internacional abre "un clima muy propicio" para anticipar las elecciones.
Hace falta "un gobierno fortalecido por el voto popular que sea capaz de llevar a la práctica las grandes reformas que apunten a un desarrollo económico sustentable", afirmóel mandatario.
Las elecciones internas en los partidos se harán el 24 de noviembre, las generales el 30 de marzo, un eventual ballotage presidencial el 30 de abril y la entrega del poder el 25 de mayo.
La convocatoria sacudió al arco político argentino, con mayoría de avales al llamado y algunas incógnitas. La más fuerte es qué sucederá con Carlos Me-nem, quien ya anunció su decisión de presentarse en las internas del justicialismo. Las dudas giran en torno de si está habilitado para hacerlo.
Los gobernadores de Neuquén y Río Negro prefirieron esperar antes de pronunciarse acerca de la convocatoria
Muchos dirigentes dijeron sentirse sorprendidos por el anun-cio, pero al menos el expresidente Raúl Alfonsín había sido avisado de la inminente convocatoria antes de viajar al exterior.
Aunque públicamente no lo admiten, en charlas reservadas funcionarios nacionales admiten que Duhalde respondió a las presiones externas e internas para crear un "horizonte previsible" en la Argentina y desactivar la peligrosa bomba de la protesta social.
La convocatoria "es una apuesta muy fuerte del gobierno a evitar un estallido social, pero Duhalde teme que ni siquiera esto funcione", dijo a Reuters una fuente cercana al presidente.
Elisa Carrió, la dirigente que aparece con mayor aceptación en la ciudadanía, se negó a discutir sobre elecciones y afirmó que "los temas ahora son la represión y el pacto con la Corte. En medio de un terremoto se discute cómo se sostiene la casa, no lo que se hace el año que viene", enfatizó.
El llamado también abre fuertes interrogantes en el justicialismo, donde aparecen numerosos candidatos con aspiraciones presidenciales.
En su mensaje, Duhalde también ratificó su deseo de que en los próximos comicios haya una renovación total de cargos electivos, pero reconoció que "esa es una atribución que le corresponde al Congreso Nacional y a los gobiernos provinciales".
"Necesitamos un gobierno fortalecido por el voto popular que sea capaz de llevar a la práctica las grandes reformas que apunten a un desarrollo económico sustentable, que es el único camino para luchar contra la pobreza y la desocupación", dijo.
Afirmó que cuando asumió por disposición de la Asamblea Legislativa, se propuso "un objetivo básico que era alejarnos de aquella situación pre-anárquica y salir de la depresión económica que ya lleva cuatro años".
"Ahora estamos muy próximos a cerrar una negociación con los organismos internacionales que ha sido larga y difícil. Eso abre un clima muy propicio para avanzar en otro proceso que el gobierno se ha propuesto y que la sociedad toda reclama", dijo.
Luego anunció: "He decidido que dentro de cuatro meses a partir de hoy los argentinos elijan en internas abiertas y democráticas sus candidatos a presidente y vicepresidente de la República y 120 días después todos decidiremos quién nos conducirá en los próximos cuatro años".
Voceros del gobierno indicaron que las señales de la inminencia de un acuerdo con el FMI fueron claves para que Duhalde anticipe las elecciones presidenciales, previstas inicialmente para setiembre del 2003.
Duhalde habló la semana pasada con el titular del Fondo, Horst Koehler, para acompañar las gestiones del ministro de Economía, Roberto Lavagna, en Washington, donde consiguió la promesa de postergar los vencimientos de la deuda de este año.
En su mensaje de anoche, Duhalde consideró que "entre todos debemos rescatar a la política como herramienta de la transformación social" y advirtió que "los poderosos siempre han podido usar su dinero para alcanzar sus objetivos, pero los pueblos sólo cuentan con la política para luchar y defender sus derechos y conquistas".
"Hoy la política necesita renovarse", sentenció el jefe de Estado, tras confirmar su intención de que en las elecciones de marzo del 2003 no sólo se elijan presidente y vicepresidente, sino también la totalidad de los legisladores nacionales, provinciales y municipales, y gobernadores en todos los estados.
Finalmente, Duhalde consideró que "la Argentina va a salir adelante y estos años que han sido de decadencia y desaciertos van a quedar definitivamente atrás. Somos un pueblo con historia que no debe temerle a los tiempos nuevos".
"El desafío de la hora es comenzar a creer en nosotros mis-mos para volver a ser una gran Nación", enfatizó. (DyN/Reuteres/Redacción Central)

Foto: Instantes después del anuncio, el presidente Eduardo Duhalde brinda en la cena de camaradería de las Fuerzas Armadas.