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El programa monetario armado por el gobierno afrontará hoy un crucial examen al licitarse la serie de bonos en dólares con vencimiento en el 2005 (BODEN), operación de la que pueden participar ahorristas con fondos de cuentas a la vista atrapados en el "corralito".
La participación en la licitación es voluntaria y el caso de no ejercer la opción el dinero será devuelto mediante el cronograma previsto, que incluye una actualización por CER. Los ahorristas deben ofertar el precio del dólar al que están dispuesto a cambiar sus fondos en pesos y luego la Secretaría de Finanzas decidirá a partir de qué valor acepta entregar los BODEN.
En caso que un ahorrista ofrezca un tipo de cambio de 2,50 pesos (o sea que por un depósito de 10.000 pesos aceptaría BODEN por 4.000 dólares) y el gobierno fije el corte en 2 pesos, el canje se hará a este último precio y recibirá BODEN por 5.000 dólares.
El resultado de la licitación será anunciado por la Secretaría de Finanzas el lunes 8 de julio antes de la apertura de los mercados financieros.
El BODEN se amortiza en 3 cuotas anuales a partir de mayo de 2004. Las dos primeras serán por el 30 por ciento del capital y la última por el 40 por ciento restante.
La actualización será por la tasa LIBO de 6 meses y los intereses serán pagados semestralmente desde noviembre de 2002. En el esquema general de canje voluntario de bonos por depósitos reprogramados (además se ofrecen BODEN 2012 y un Bono en pesos a 5 años para ahorristas con plazos fijos reprogramados) el gobierno necesita al menos lograr la aceptación del 30 por ciento de los ahorristas para que el programa monetario armado pueda ser cumplido.
En una primera recorrida por los bancos se percibe poco interés por la operación, aunque distintos oficiales de cuenta aseguraron que en las últimas horas se multiplicaron las consultas telefónicas.
La pregunta común es "a qué precio saldrá el dólar" y la impresión es que podría ubicarse en torno a los 2 pesos.
La decisión del ministro de Economía, Roberto Lavagna, de avanzar en un esquema "voluntario" lo enfrentó con el Banco Central y también con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Las discrepancias con el Banco Central subsisten pese al alejamiento de Mario Blejer de su conducción, pues las actuales autoridades se pronunciaron a favor de un canje compulsivo.
No obstante, el actual presidente del BCRA a menos de 24 horas de realizarse la operación dijo que está de acuerdo con el esquema diseñado por Lavagna y aseguró que tendrá un resultado satisfactorio.
El FMI también cree que el canje debe ser obligatoria. La cúpula del organismo decidió darle una oportunidad a Lavagna y dejarlo avanzar en su proyecto, pero auditando el programa paso a paso. La revisión estará a cargo de un grupo de expertos internacionales en Finanzas, que hará un trabajo de apoyo y luego emitirán opiniones, pero sin que éstas sean tomadas como un veredicto final (DYN)
Siguen los cruces entre el BCRA y Economía
El presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, sostuvo ayer que "los ministros de Economía tienen que opinar sobre macroeconomía y finanzas", y afirmó que "la política monetaria es autónoma y la tiene que hacer el Banco Central, le guste a quien le guste".
"A quien le guste bien y si no, lo siento mucho. Yo voy a ser autónomo. La política monetaria la definimos nosotros", remarcó Pignanelli, quien también advirtió que "la banca pública tendrá que cumplir con las normas que defina el Central".
En ese sentido, el titular del Central puntualizó que "tiene que ser eficiente, porque la sociedad no puede soportar una banca pública ineficiente".
De esta manera, Pignanelli retomó la tónica de su antecesor, Mario Blejer, quien precisamente abandonó su cargo tras un fuerte enfrentamiento con el Palacio de Hacienda, respecto de la política monetaria y financiera. También se refirió a "la mal llamada inmunidad" solicitada por la autoridad monetaria para los miembros de su Directorio, y precisó que el proyecto enviado al Parlamento plantea "una mayor protección jurídica sobre determinadas situaciones".
Pignanelli destacó que "hubo muchas dificultades cuando se avanzó sobre la autonomía del Banco Central, pero hubo muchos éxitos cuando fuimos autónomos".
El número uno del BCRA relativizó el escaso interés de los ahorristas en el BODEN 2005 que se licitará hoy, al señalar que "los argentinos tenemos la costumbre de esperar hasta el último momento", y abogó porque "haya buenas noticias y la gente opte por un título que es muy atractivo" .(DYN)
Superávit del Tesoro
El Tesoro Nacional, en junio, registró un superávit de 217 millones de pesos, informó ayer la secretaría de Hacienda.
Si se incluye en el balance el déficit de 76,8 millones de pesos de las cajas provinciales, el resultado arroja un saldo positivo de 140,2 millones de pesos.
El superávit se logró básicamente por la suspensión de los pagos de intereses de la deuda pública, que en junio fueron de sólo 276,9 millones de pesos, mientras que en junio de año pasado se habían erogado para ese fin 1.311,6 millones de pesos.
Por segundo mes consecutivo el resultado primario del Tesoro Nacional (gastos menos ingresos sin contar el pago de los intereses) alcanzó un saldo a 417 millones de pesos, lo que significa una reducción de 556 millones respecto al saldo positivo de 973,1 millones de igual mes del año pasado.
Los ingresos corrientes fueron de 1.935,7 millones de pesos, mientras que los gastos corrientes alcanzaron a 1.698,6 millones de pesos.
Los ingresos cayeron en forma interanual 241,2 millones de pesos, al tiempos que los gastos se redujeron (por el no pago de intereses) 664,6 millones de pesos.
Sobre el total de ingresos los tributarios fueron de 1.686,2 millones de pesos; los ingresos no tributarios sumaron 3,6 millones; por rentas de la propiedad se obtuvieron 219,7 millones; por transferencias corrientes el Tesoro logró 14,5 millones y las contribuciones figurativas se ubicaron en 11,7 millones de pesos.
El PAMI no se privatizará
El interventor del Pami, José Manuel Corchuelo Blasco, precisó ayer que con la reforma de la Ley de Pami aprobada en el Senado ya no podrá haber privatización, provincialización, intermediaciones o gerenciaciones dentro de la obra social de jubilados.
El médico sanitarista chubutense destacó que con la nueva norma "se obtiene un fortalecimiento del sistema de control del Pami que transparentará esos mecanismos, al incorporar a la Auditoría General de la Nación y crear una sindicatura propia".
"Ya no será la voluntad del funcionario de turno la que decida si trabajamos o no con la auditoría, sino que será la ley la que lo disponga y además obligará a que se concursen todos los cargos de la sindicatura", subrayó el funcionario.
Corchuelo Blasco calificó como "el corazón de la ley al artículo segundo que impide la provincialización o privatización y que alguno vuelva a querer introducir intermediaciones o gerenciaciones".
"Esos mecanismos -dijo- generan dinero improductivo que no se destina a la compra de servicios, sino que pasa a ser plata fácil que no termina en cosas transparentes y en algunos casos se destina a que no haya controles dentro del Pami".
"La ley -agregó- fortalecerá la estructura del instituto y a partir de ahora, toda gerenciación la hará el propio personal del Pami dirigido desde sus centrales".
El sanitarista aseguró que "al Pami hay que dejar de ponerle mala política partidaria adentro y merterle política desde lo sanitario y lo social".
"El tema moderno -destacó- es hacer contratos de gestión con proyecto de metas a lograr en cuatrimestres o años, de manera que una persona concursada avance hacia esos objetivos y los cumpla". |
