Viernes 7 de junio de 2002

 

Municipales protestaron frente a la CEB

 
  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los trabajadores municipales decidieron involucrar abiertamente a la CEB en el conflicto que mantienen con el intendente Alberto Icare y realizaron un ruidoso "escrache" frente a las oficinas de la empresa.
Le atribuyen a la distribuidora eléctrica el padrinazgo político de Icare -que pertenece al MUP, como muchos de sus directivos- y también la autoría intelectual del ajuste que originó las actuales medidas de fuerza.
El Soyem lleva ya 11 días de paro, a pesar de que Icare aceptó revisar la anunciada rebaja salarial del 14 por ciento. Recién hoy los trabajadores cobrarán el saldo adeudado de los salarios de febrero y podrían resolver una vuelta a la actividad.
El acuerdo que se estuvo tejiendo a lo largo de toda la semana prevé la constitución de una "mesa de concertación" que tendría la misión de elaborar un nuevo plan de ajuste que rinda un ahorro mensual de 170 mil pesos mensuales. El intendente anticipó a ese respecto que si la comisión no llega a un dictamen serio y aplicable, insistirá con los recortes salariales.
Uno de los perjuicios mayores que causó el paro fue el corte de la recolección de basura, que el Ejecutivo resolvió con apoyo de ex trabajadores de la anterior prestadora del servicio y de beneficiarios de los planes laborales.
Otro problema serio es el "ingreso cero" en concepto de tasas y gravámenes por el cierre de las ventanillas de recaudación. El intendente y sus colaboradores reciben a diario numerosas quejas de contribuyentes que quieren pagar y no pueden.
Los municipales siguen ocupando la planta baja de la intendencia y hoy analizarán en asamblea la última "contrapropuesta" de Icare, que ya no tiene la dureza de los planteos iniciales.
Ayer el único episodio ríspido del conflicto fue el "escrache" a la CEB, del que participaron unos 70 trabajadores. Con cánticos y proclamas denunciaron que la Cooperativa "está detrás" del severo ajuste que el intendente propuso a poco de asumir y recordaron que a la CEB, pese a prestar un servicio monopólico, "no le tembló la mano cuando debió echar o bajar sueldos a su personal". Personalizaron las críticas en el referente del MUP Juan Carlos Alvarez y también en Jorge Pérez, un trabajador municipal que tiempo atrás fue dirigente del Soyem y ahora goza de una confusa licencia porque tiene un cargo directivo en la Cooperativa.
Durante la manifestación no hubo incidentes pero igual en las oficinas de la distribuidora eléctrica las puertas y ventanas se cerraron preventivamente y la policía observó sin intervenir.
   
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