Israel reocupa territorios tras feroz ataque suicida
Un palestino se inmoló en un colectivo repleto de estudiantes. Otras 19 personas murieron y al menos 50 resultaron heridas. El gobierno de Sharon comenzó una dura respuesta militar y política.
El comunicado fue emitido al término de la reunión del gabinete reducido, que había sido convocado tras el atentado cometido ayer por un suicida palestino contra un autobús en Jerusalén, y que dejó veinte muertos.
El gobierno anunció que reocupará zonas de Cisjordania y que nuevos ataques significarán más territorios palestinos vueltos a ocupar. Unidades de infantería, decenas de blindados y carros armados apoyados por helicópteros participan de la operación
También se debatió la posible expulsión de colaboradores allegados al presidente palestino Yasser Arafat, pero no la del líder palestino, según la misma fuente.
La decisión se produjo después que se concretara ayer el peor ataque en Jerusalén en seis años. Un palestino suicida detonó una carga de explosivos dentro de un autobús repleto de estudiantes y empleados de oficina, causando 19 muertos y más de 50 heridos,.
La explosión, en el sur de Jerusalén, convirtió el autobús número 32 en un amasijo de metales retorcidos. El ruido de las sirenas no pudo acallar los gritos de los heridos, que yacían en el suelo en medio de grandes charcos de sangre.
La policía dijo que varios adolescentes estaban entre los muertos y que muchos niños resultaron heridos en el ataque, que se atribuyó el grupo islámico Hamas.
"Vi gente volando por los aires. Había sangre por todas partes", dijo Yakir Barashi, de 14 años, quien acababa de bajar de otro autobús en el sur de Jerusalén. "Tengo miedo de viajar en autobús, de ir a la escuela. Vi a un niño con clavos en todo el cuerpo".
Shalom Sabag conducía su automóvil delante del autobús y corrió a sacar a las víctimas del ataque, el más reciente en una serie de atentados suicidas en el levantamiento palestino de 20 meses contra la ocupación israelí en Cisjordania y la Franja de Gaza.
"Había cadáveres apilados cerca de la puerta del autobús del lado derecho", dijo. "Saqué los cuerpos de dos jovencitas y un hombre. Había una muchacha que no podré olvidar. Tenía una larga trenza que le bajaba por la espalda y yacía sobre su estómago. Un hombre estaba herido en una mano, pero cada vez que lo tocábamos gritaba", dijo el testigo.
Horas después, tropas israelíes emplazadas cerca de la dividida ciudad de Hebrón mataron a balazos a un militante palestino requerido por el asesinato en marzo de dos observadores internacionales en Cisjordania, dijeron fuentes israelíes de seguridad.
El atentado se produjo poco después de que Washington y el líder palestino, Yasser Arafat, criticaron planes israelíes de levantar una cerca de seguridad en su frontera con Cisjordania para evitar la infiltración de atacantes suicidas.
La escuela de los kamikazes
Un video donde la organización terrorista Hamas explica cómo convertirse en un kamikaze en pocas horas, y provocar el mayor número de víctimas posibles, fue difundido ayer por la cadena de televisión norteamericana ABC
El video representa un verdadero manual de adiestramiento para convertirse en kamikaze. La lección dura tres horas y media, donde un enmascarado explica dónde comprar el material necesario para fabricar la bomba y recuerda el listado de objetivos: automóviles, paradas de autobús, mercados y bases militares.
Al mismo tiempo, ayer el grupo Hamas difundió una carta del kamikaze muerto ayer en el atentado suicida en la que afirmó que detestaba la idea de "matar o de morir", pero ellos debían sentirse orgullosos de que él sea un "mártir".
"Esta operación no significa que me guste matar o que me maten, pero lo hice para que las futuras generaciones tengan una vida mejor", escribió .
El terror se apodera de los padres
JERUSALEN (ANSA) - Una ola de terror se extendió ayer por Jerusalén entre miles de padres al conocerse las primeras noticias sobre el atentado suicida contra un autobús urbano en el que podían viajar sus hijos que, a esa hora, concurren a la escuela.
Las noticias sucesivas, al precisar el área del atentado, si bien tranquilizó a algunos, hizo crecer la angustia a otros.
Del autobús de la línea 32A que había partido del barrio de Ghilo, periferia este ocupada de Jerusalén, con destino al centro de la ciudad, no quedaron más que hierros retorcidos y quemados. La explosión se produjo en una autopista de ocho carriles que, entre Ghilo y el barrio de Patt, atraviesa una zona descampada donde el terrorista atacó.
El atacante suicida -Mohammed Al Rol, de 22 años, estudiante de la universidad de Nablus y activista de Hamas- atacó, en apariencia deliberadamente, al autobús que en ese momento estaba lleno de jóvenes que iban al colegio.
Este hecho fue el que hizo pensar durante horas que la mayor parte de las 19 víctimas eran estudiantes, un temor que no fue confirmado por el Instituto de Medicina Legal, donde durante todo el día se trató de identificar los cuerpos irreconocibles. Seguramente entre los alrededor de 50 heridos se encuentran muchos jóvenes.
La explosión fue de tal potencia que los restos humanos llegaron a varios metros de distancia, lo mismo que las partes del vehículo.
Los autobuses de línea regular, objetivos cada vez más vulnerables y difíciles de proteger, son uno de los blancos favoritos de los atentados palestinos. Según las primeras informaciones, el palestino suicida viajaba a bordo del autobús
Los medios israelíes comenzaron a reproducir de inmediato la reacción. Agolpados de un lado de la barrera de seguridad, numerosos israelíes furiosos exigían "la expulsión" de los árabes.
Del otro, jóvenes palestinos miraban la escena sin pestañear. Los pasajeros de este autobús de la línea 32 se dirigían al trabajo o a la escuela. Habían salido del barrio de colonización de Gilo, construido en las tierras conquistadas por Israel durante la guerra de 1967 y ahora dentro de los límites municipales de Jerusalén.
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