Lunes 3 de junio de 2002

 

Ahora hay que apuntarle a Inglaterra

 

El debut triunfal motiva para lo que sigue de torneo.

  Apelando a lo que resume tan bien Carlos Bianchi, en estas instancias de la altísima competencia, lo que importan son las cuentas. Y hoy por hoy, eso cierra de manea favorable a la selección argentina.
Haber dejado atrás a Nigeria (1-0) sirvió para sacarse de encima ese temor por tener que enfrentar a un equipo como el africano y justo en el primer choque. Además, se superar el sindrome de ese compromiso.
"Ganar en el debut es más que un triunfo", observaba el "Virrey" en su análisis de ayer en "Olé-Río Negro". Y recordó un dato aleatorio más: tener la mitad de la clasificación y los adversarios directos dos puntos atrás (por el empate de 1-1 entre Inglaterra y Suecia), presenta un panorama alentador en función de apuntar al primer objetivo: el pase a la segunda ronda.
De las siete etapas que demanda el derrotero hasta la cumbre de un torneo de este tipo, una ya quedó superada. Y vale lo que se hizo, por todo lo que significaba medirse en un primer partido con este equipo africano, por allí conceptuado como un rival de mucho riesgo pero que, ahora y tres puntos abajo de Argentina, lo convierten en un árbitro en la puja clasificatoria con los otros contendiente del grupo.
Argentina ganó ayer. Lo mereció. Pero ello no obsta de necesitar que el entrenador repase minuciosamente esa producción, por ser algo fundamental frente a los difíciles partidos que se avecinan. Quedarse con lo hecho en del debut es ser mezquino con uno mismo. Es conveniente mejorar algunos sistemas, de manera especial los que se relacionan con el desarrollo del juego de mitad de cancha hacia adelante.
Ante Nigeria, la selección argentina mostró como un valor interesante es que respeta al rival. Es muy bueno eso, porque la confianza en exceso puede terminar siendo la peor consejera. El ejemplo de Francia no hay que perderlo de vista y lo que les pasó ayer a los paraguayos, es otro dato más. No hay rivales chicos, menos aún antes de que esté concluido un partido.
En el análisis global, lo mejor estuvo en la línea de fondo. Al menos, ahí es donde no se notaron defasajes, más aún con el interrogante que planteó la baja prematura de Ayala, lesión de la que en las próximas horas se sabrá su gravedad.
La recomposición del sector no se vio afectada, porque en los laterales la tarea de Placente fue sobria y segura, en tanto que por el otro andarivel y cuando se vio asediado, Pochettino no escatimó algún "suelazo" al delantero que intentara por tal callejón. En el medio y en una posición donde mejor se desenvuelve, Samuel casi no tuvo dificultades.
Donde es muy probable que Bielsa opere a fondo en estos días que median hasta el partido con los ingleses será en el medio. Si todo el juego tiene que pasar por Verón, hay que definir el estilo, porque excederse en el pelotazo -como pasó muchas veces ayer- es limitar al sacrificio de un atacante contra defensores que superan en número y físico. Y eso, ante Inglaterra por ejemplo, quizá sea inútil.
Como solía recurrir Menotti, a lo mejor sirva lo de las "pequeñas sociedades", es decir juntando en espacios de no grandes dimensiones a los más talentosos. ¿Verón-Ortega es una buena dupla? Lo es. También está la alternativa de Aimar cuando se pretende inyectar velocidad y decisión frontal hacia el área contraria.
En la tarea de contención, Sorín -para algunos medios no calificado como gran figura- fue de lo mejor que tuvo el equipo ante los nigerianos. Ayudó atrás, marcó en el medio y hasta provocó apariciones como un fantasma en el área adversaria, con chances (dos en su caso) muy claras para anotar. Jugó, como se dice, para comerse la cancha.
Está muy claro que Bielsa tenía decidido hace rato que Batistuta iba a ser el nueve del debut. El goleador histórico exhibió una vez más esa prepotencia para buscar el arco desde cualquier posición y buscar en el juego aéreo más allá de cualquier desventaja en número o carga física. Por ese afán llegó el gol, nada menos que el único para el triunfo, en una de las maniobras que provienen del "laboratorio": el centro bien cerrado sobre el segundo palo.
Parece claro que si el "Piojo" no está en su mejor día, la opción del Kily González es oportuna por su condición "societaria" en el juego de toque y circulación con los volantes.
Acá, en el ataque, surge una pregunta decisiva: ¿Cuándo estará totalmente apto Caniggia? Bielsa hizo una apuesta fuerte al mantenerlo en el plantel. Si se recupera pronto de la lesión que le afectó la rodilla, será un buen aliado para armar una dupla potente y voraz con Batistuta, como la de hace ocho años.
Mientras aún se saborean las mieles de este debut en ganador, como se dice para calentar motores, esta vez alcanzó.
Pero el Mundial recién comienza y en la siguiente estación espera Inglaterra. (AR).

"Debimos ganar por más"

Marcelo Bielsa se mostró satisfecho con el debut, aunque consideró que el resultado "debió ser más amplio".
"Fue un triunfo merecido. Debió ser más holgado y eso hubiera sido justo", dijo Bielsa. Y agregó: "El nivel de Argentina me pareció bueno y el aporte de las individualidades también", agregó.
"Estamos satisfechos porque dejamos atrás el debut, que siempre es una cosa muy importante", continuó en su primer análisis el entrenador.
"La verdad es que estoy muy sereno, porque ganar siempre aporta paz, y máxime a comienzos de un mundial", aseveró.

   
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