Miércoles 12 de junio de 2002 | ||
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Flojo comienzo de "Los Osos" |
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Un trío que se quedó en promesas en su debut |
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La última imagen que dejó el magazine de entretenimientos "Los osos", que la semana pasada comenzó por Canal 13 con conducción de Lalo Mir, Favio Posca y Alejandro Fantino y que irá los miércoles de 23 a 0 resultó, con Mir juntando las manos pidiendo perdón, lo que en Derecho suele llamarse una confesión de partes que releva la presentación de pruebas.
Lo de Mir, hombre habituado a decir lo suyo y dar la cara, sonó a acto de honestidad intelectual: el programa rindió 11.4 puntos de rating, pero registró una abrupta caída entre su comienzo (17.1) y su cierre (10.5), como si en su tramo final la teleplatea se hubiera persuadido de cuán poca sustancia había bajo tanta promoción. El debut del programa que comparte productora (Promofilm) y le roba escenografía y algunas fórmulas a "Grandiosas" -de ahí el nombre, que iba a ser "Grandiosos", luego "Grandes osos" y finalmente "Los osos"-, fue errático y desparejo. Apenas Posca logró sortear con humor y frescura algunos momentos, mientras que el resto de la emisión inaugural pecó de inconexo, superficial, aburrido y, aunque parezca extraño, también previsible. El desconcierto llegó a tal punto que Mir, en un momento, y Fantino, en dos, leyeron los gags que tenían que hacer, quitándoles algo de sorpresa y gracia. Hubo una entrevistada, Araceli González, y después una sucesión ininterrumpida de secciones: el informe especial, que trató sobre el "fin de semana ideal"; un entrelíneas, en el que se decodifican los mensajes que una esposa deja pegados en la heladera; un relato en clave futbolística de la reunión de gobernadores peronistas en La Pampa -que sucedió hace 15 días-; el entretenimiento "de quién son esos gemidos", y algunos otros. Tampoco los conductores pudieron hacer maravillas con un material que pareció viejo e improvisado y que en ningún momento tuvo brillo, picardía o inteligencia. Si alguien pensó que, contando con poco dinero y pocas ideas y copiando una fórmula se podía generar un éxito, este primer envío desmintió el albur. "Los osos" necesitan todavía muchas "horas de vuelo" y una serie de "afinaciones" para perfilar un programa que pueda atraer, generar entusiasmo y disfrutar de las "golosas mieles" del rating. (Télam). |
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