Dura contraofensiva en Colombia
El ejército mató a unos 28 guerrilleros y destruyó un gran laboratorio de cocaína
Tropas de las fuerzas antiguerrilleras del Ejército, comandadas por el general Arcesio Barrero, descubrieron en cercanías de los municipios orientales Vista Hermosa y San Juan de Arauca a presuntos grupos guerrilleros de las FARC que mantenían un cerco impidiendo el ingreso o salida de personas, alimentos y vehículos.
El informe militar aseguró, además, que los guerrilleros "extorsionaban y secuestraban" a los pobladores. Según el reporte, durante más de un día de intensos combates fueron abatidos por los militares 17 miembros de las FARC, entre ellos el comandante "Yiyo", presunto encargado de preparar coches-bomba que mantenían sitiada la región, dijo el general Barrero.
También dentro de los 42.000 kilómetros cuadrados de la ex zona de distensión, en proximidades de los municipios de Vistahermosa y la Macarena, el Ejército enfrentó a una columna de guerrilleros que supuestamente se dirigía hacia las afueras de Bogotá para realizar "actos terroristas", siempre de acuerdo a la versión de los militares.
En los combates, que continuaban ayer, murieron por lo menos siete guerrilleros -entre ellos dos mujeres- y el balance de heridos podría llegar hasta los 20, de acuerdo con la versión castrense. En el estado noroccidental de Antioquia murieron tres guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) cuando una patrulla militar impidió que colocaran explosivos para destruir un puente en la autopista entre Medellín y Bogotá.
Otro guerrillero de las FARC también murió en Antioquia durante un breve combate con tropas del Ejército.
En Medellín la policía dijo haber descubierto un coche bomba con 85 kilos de dinamita distribuida en 85 barras de un kilo cada una.
Pero mientras en la antigua zona desmilitarizada las tropas combatían contra la guerrilla, la división antinarcóticos de la policía destruyó en la parte de rural de Vistahermosa y La Macarena dos "grandes" laboratorios que, según la versión oficial de los uniformados, pertenecían a las FARC y eran utilizados para procesar entre ambas unas cuatro toneladas semanales de cocaína para traficar a Estados Unidos y Europa.
Así, al menos, lo sostuvo el comandante nacional de la policía, general Luis Eduardo Gilibert, quien agregó durante una conferencia de prensa que además de los laboratorios, fue destruido un campamento para unos 150 guerrilleros pero, curiosamente, no se produjo detención alguna. De acuerdo con los cálculos de Gilibert con la eliminación de los laboratorios se evitó que llegaran a las calles de ciudades de naciones industrializadas unos 74 millones de dosis de cocaína, con un valor de 184 millones de dólares.
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