 |
||
 |
Jueves 14 de marzo de 2002 | |
 |
Condenado a perpetua por el crimen de un taxista |
|
El joven condenado reconoció que su cómplice llevaba un arma de fuego que funcionaba y que iban a cometer un asalto. El trágico hecho ocurrió en Zapala y causó conmoción. |
||
| ZAPALA (AZ).- Carlos Alberto Curimil fue condenado a prisión perpetua por el crimen del taxista César Morales ocurrido en diciembre de 2000 en esta ciudad. El tribunal consideró probado que Curimil, quien actuó en complicidad con Miguel Angel García quien ya fue condenado, fue coautor materialmente responsable de homicidio agravado, privación ilegítima de la libertad y robo con armas. La condena de los jueces coincidió con la pena que habían solicitado la fiscalía y la querella. La defensa, en tanto, se había pronunciado en favor de una condena como partícipe secundario de robo y había reclamado la libertad condicional del imputado. Los magistrados consideraron ampliamente probado que García y Curimil abordaron el taxi de Morales en la madrugada del 1 de diciembre de 2000 con el objetivo de robar. "Vamos a hacer unos pesos" le dijo García a Curimil y este consintió. Luego de indicar un domicilio de la calle Diputado Fernández, los condenados cambiaron el destino y le pidieron que los lleve hasta Los Catutos. Según los jueces, a la altura del autódromo García extrajo un revólver calibre 22 y amenazó al chofer para que ingresara en un camino secundario. Luego de recorrer unos metros le exigieron que se baje y lo obligaron a sentarse en el asiento trasero del Fiat Duna. García tomó el volante y Curimil, desde la butaca del acompañante, le apuntaba a Morales con el arma. Instantes después se detuvieron tras realizar varias maniobras en zig zag y dañar el cárter del automóvil. En ese momento Morales habría intentado huir y García le disparó hiriéndolo en la pierna. Casi al mismo tiempo el taxista habría reconocido a Curimil por lo que García le dijo a su amigo: "tenemos que matarlo porque este nos va a mandar presos". Según los fundamentos, luego de introducirlo en el baúl lograron avanzar unos metros hasta que el coche se detuvo. Abrieron el baúl, Morales intentó salir y García le disparó desde atrás provocando la caída del infortunado taxista. A todo esto, Curimil, que estaba tratando de "bolsearse" inhalando en el tanque combustible, le dijo a García: "sos un maricón, no te animás a matarlo". Acto seguido el joven vació el cargador en el cuerpo de la víctima. Para los jueces el rol de Curimil "nunca fue pasivo" y por ende "deberá oblar como coautor" de los hechos al aceptar desde el comienzo que "hubo acuerdo para robar". También subrayaron que "Curimil sabía que García estaba armado con un revólver que se podía disparar, porque lo habían probado previamente". Además resaltaron en el fallo que desde el momento en que Morales reconoce a Curimil los imputados comenzaron a actuar "procurando lograr la impunidad del homicidio". El condenado fue detenido pocas horas después del homicidio en una bailanta de esta ciudad y cuando prestó declaración reconoció su participación. |
||
|
® Copyright Río Negro Online - All rights reserved
|
||
|
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación |
||
 |
|
|
 |
||