Miércoles 27 de febrero de 2002

 

Docente presentó un amparo para trasplantarse

 

Mercedes Gelves piensa que puede tener los días contados. Por eso se controla mientras espera que la Justicia obligue a la provincia a hacerse cargo de la cobertura de su tratamiento.

  ROCA (AR).- Mercedes Gelves habla pausado, con una calma autoimpuesta. Obligatoria. Cuando habla y logra no agitarse cuenta que necesita "urgentemente" un trasplante de pulmones, que la Fundación Favaloro de Buenos Aires "me dijo que sí o sí me lo tengo que realizar", que está esperando que el Ipross le autorice los primeros exámenes desde hace semanas, que también espera la decisión de la justicia provincial a un recurso de amparo que presentó para obligar a la obra social a ayudarla, que ya casi no puede caminar, que solo utiliza para respirar el 30 por ciento de la capacidad de sus pulmones, que cobra 200 pesos y que los primeros estudios le cuestan cinco mil pesos. "Es por eso que hablo pausado. Son tantos los problemas, que si no los cuento así me ahogan" explica.
Gelves es docente y casi ni necesita explicar con detenimiento la situación económica por la que atraviesa. Pese a eso lo hace. "Gano poco más de 200 pesos y con eso sólo puedo alimentar a mi familia, imagínense cómo voy a hacer para costear una operación que en la primera etapa ya es imposible de afrontar".
Mercedes padece desde hace tiempo una fibrosis que avanza sobre sus tejidos pulmonares, que no tiene cura y que si sigue progresando puede provocarle hasta la muerte.
De hecho, en estas semanas de trámites y más trámites para conseguir la cobertura de la obra social la situación parece haber empeorado.
"Como no es una enfermedad que se pueda controlar ni siquiera mediante un tratamiento, ya es casi seguro que necesite un trasplante de corazón" cuenta.

Penurias

Los primeros pasos para enfrentar una enfermedad que transformó su cotidianeidad con tos y vómitos constantes, con la imposibilidad de dar más de unos pocos pasos por día y en su propia casa –en donde permanece la mayor parte del día sentada– y con el alejamiento de su lugar de trabajo, empezó ya hace meses.
"En noviembre y en enero me practicaron los primeros exámenes en la Fundación Favaloro, en donde ya tengo completo mi banco de sangre y donde esperan la realización de estos últimos exámenes para colocarme en la lista de espera de donación de órganos".
Ayer mismo Mercedes recibió la primera noticia que parece empezar a despejar el camino.
"Por lo pronto el Ipross me va a cubrir el 80 por ciento de la primera tomografía, lo que representa un alivio. Pero preciso que me autoricen los otros exámenes".
Se refiere a los que le cuestan cinco mil pesos y que la obligarán a permanecer internada en la Fundación Favaloro durante siete días. "De ahí, a la lista de espera" se esperanza. "Lo que hay que entender es que no necesito los exámenes para saber si es necesario el trasplante. Los médicos me advirtieron que si no me trasplanto me muero" aseguró. Por estas horas, Mercedes espera la resolución de la Cámara Laboral de Río Negro a un recurso de amparo que se supone obligará a la obra social de los empleados públicos rionegrinos a intervenir en esta historia y posibilitar los primeros exámenes.
Mientras tanto Mercedes afronta el atraso salarial del sector docente con subsidios del gremio docente, que ayudaron a costear los primeros viajes a capital federal y los 80 pesos que deberá aportar en la próxima tomografía.

Hospitalarios de Cipolletti y Allen profundizan sus reclamos

CIPOLLETTI, ALLEN (AC - AA).- Los trabajadores de los hospitales de Cipolletti y Allen han paralizado sus actividades en reclamo de sus salarios y en protesta por la crisis de salud. Mientras, los pacientes llevan las de perder.
En el hospital de Cipolletti decidieron ayer continuar las jornadas de paro, pero ahora "por tiempo indeterminado".
Los hospitalarios vienen reclamando desde hace tiempo que les den una solución ante "la crítica situación salarial" y el "vaciamiento" del hospital. La semana pasada realizaron asambleas y decidieron implementar un paro por 48 horas a partir del lunes. Ayer, al cumplirse el plazo fijado, resolvieron profundizar la protesta: "empezamos con un paro por tiempo indeterminado", afirmaron.
"Queremos que nos paguen nuestros sueldos y que nos den soluciones", dijo el delegado de UPCN, Tomás Mariano.
El lunes por la noche los hospitalarios recibieron la visita del titular de Salud Pública, Alejandro Marenco, quien les informó que se está buscando el modo de hallar una salida a la problemática que afecta a todos los hospitales rionegrinos. Pero nada pudo confirmarle a los cipoleños respecto del pago de los salarios. Sólo les anticipó que en esta semana se estarían entregando los tickets canasta.
Ante este panorama, los trabajadores decidieron en la asamblea seguir con las medidas de fuerza. Esto significa que sólo se atenderán las guardias y a los pacientes internados. Hoy repetirán la medida de ayer. Cortarán la calle de acceso al hospital (dejando el paso para que se movilice la ambulancia) y le informarán a los pacientes y a los vecinos en general por qué no hay atención.
En tanto, en Allen si bien, ayer se garantizó la atención en el sector de guardias y de internaciones, además de que un profesional se encargó de cubrir el área de psiquiatría, la actividad en el resto de las áreas se vio paralizada. Sólo fueron atendidos casos de urgencia, se informó. La protesta pacífica llevada adelante por los hospitalarios autoconvocados del "Ernesto Accame", en los puestos laborales, se centra en el reclamo por el pago de los salarios adeudados y también en procura de exigir el restablecimiento de la obra social Ipross.
"Repudiamos enérgicamente al gobierno de la provincia por la difícil situación que vivimos los trabajadores públicos de la misma. Padecemos desde el año 1995 severos y continuos ajustes y recortes de nuestros ingresos, sumándose a esto la progresiva pérdida de nuestros derechos elementales", sostuvieron los empleados a través de un comunicado.
Allí reclamaron el pago adeudado de parte del salario del mes de diciembre y el sueldo completo del mes de enero, además de los aguinaldos correspondientes al 2001, afirmaron.
La adhesión al paro fue casi total en la jornada de ayer, ya que se plegaron a la medida tanto profesionales médicos y enfermeros, como el resto del personal que se desempeña en el edificio local de salud.

Foto: Mercedes Gelves pierde el aliento para explicarse. La enfermedad le resta aire en los pulmones tanto como la crisis del Ipross.

   
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