Viernes 15 de febrero de 2002

 

Cautelosa, Di Biase inició las sesiones ordinarias

 

La intendenta reiteró su idea de concertación.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La concejal a cargo de la intendencia, Graciela Di Biase, abrió ayer el período de sesiones ordinarias en el Deliberante reiterando su propósito de gobernar hasta abril próximo en un clima de concertación y evitando todo sobresalto.
Di Biase reconoció las "horas difíciles" que vive la ciudad y propuso que todos los barilochenses "tiren juntos", porque "no existen los héroes aislados: el héroe social es y debe ser colectivo".
Evitó cualquier referencia directa al traumático gobierno de Atilio Feudal, quien debió renunciar hace 20 días jaqueado por la crisis. Sólo dijo que cuando le tocó asumir encontró un municipio "quebrado", una "confrontación angustiante" con los trabajadores y los beneficiarios de planes laborales, y un "hondo malestar generalizado".
Según lo establecido en la Carta Orgánica, el Concejo debió convocar a nuevas elecciones de intendente, que se llevarán a cabo el próximo 28 de abril.
La intendenta reivindicó también algunas de las líneas de acción que impulsó en estos días para las diferentes áreas, entre ellas la conformación de un gabinete austero, donde unos pocos funcionarios políticos se mezclan con empleados de planta.
No todos ellos la acompañaron durante el mensaje, ya que estuvo ausente Manuel García, un contador de planta que quedó a cargo del área de Hacienda.
Di Biase se mostró cuidadosa y no agitó ningún tema conflictivo. El discurso, de cinco carillas, evitó las frases tajantes y abundó en generalidades. Faltaron los diagnósticos precisos, las cifras y los objetivos concretos. En su descargo la intendenta alegó que ante el descrédito de la dirigencia "no queda espacio para coloridas promesas sin fundamento", sino sólo para "trabajo, austeridad, transparencia y participación".
Habló de la importancia de las políticas sociales y anunció la confección del esperado "padrón único de beneficiarios". También reconoció la necesidad de buscar alternativas menos costosas al servicio de recolección de residuos y de revisar otras concesiones, pero no mencionó plazos ni metas de ahorro.
La intendenta obvió también cualquier detalle sobre la dimensión del déficit y de la deuda municipal, y sobre las recetas para enfrentarlos. Sólo refirió la decisión de avanzar en la discusión del Estatuto del Empleado Municipal, algo a lo que ya obliga la ordenanza de Emergencia Económica.
Una coincidencia que llamó la atención fue que Di Biase -al igual que Feudal- apeló un par de veces al gastado concepto de la "refundación" para caracterizar el tiempo que le toca vivir a Bariloche.
Tras escuchar las palabras de Di Biase, el concejal del MPP Jorge Temporetti dijo que esperaba mayor profundidad en las medidas de recorte y austeridad. Dijo por ejemplo que él ya tiene una propuesta para corregir errores en la liquidación de adicionales en los sueldos del personal, que alcanzarían para ahorrar unos 150 mil pesos.
Por su parte, Claudio Lueiro (del PPR), cuestionó el mensaje de Di Biase porque "parece haberse olvidado de que fue oficialista. A juicio del edil opositor, la intendenta a cargo "es responsable" de lo ocurrido con el gobierno de la Alianza "y no ejerce ninguna autocrítica personal. Está aprovechando la crisis institucional para meter a todos en la misma bolsa".
   
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