En deplorable estado encuentran a las escuelas en Río Negro

Los directores piden postergar el inicio de clases. "El deterioro edilicio y el atraso salarial atentan".

"Está todo mal en la educación pública rionegrina. Estamos, una vez más, en emergencia educativa", juzgaron al unísono directores de escuelas primarias y secundarias de la provincia -consultados por "Río Negro"- que volvieron ayer a sus puestos de trabajo e impactaron con las escuelas abandonadas, los errores en la listas de designaciones y la falta de fecha para cobrar diciembre, enero, el aguinaldo y el incentivo docente.
Por ello, reclamaron que el Consejo Provincial de Educación modifique el cronograma escolar hasta dar solución a los reclamos planteados, caso contrario -dicen- "que se vayan del gobierno".
En una recorrida que realizó este diario por las principales escuelas de la provincia, la mayoría de los edificios escolares se vieron destruídos o bien en completo estado de abandono, en contraste oposición a los dichos de Jorge Lamarre, director general de Educación de Río Negro, quien anteayer sostuvo que "en general los edificios están en condiciones para el dictado de clases".
Aunque todavía no hay nada decidido a nivel gremial, los próximos días son decisivos con respecto a la suerte de este 2002. Un buen termómetro del malhumor docente es la catarata de reclamos y quejas con que los directores de escuelas de Roca empezaron ayer el año en la delegación del Consejo Provincial de Educación en esta ciudad. Allí hablaron durante largos minutos sobre un ya insostenible atraso salarial y sobre edificios que, sin exagerar, pueden jurar que ponen en riesgo la seguridad física de los miles de alumnos que concurren a las escuelas. En ningún caso encontraron la respuesta que fueron a buscar y hoy estarán otra vez allí, a las 10 de la mañana.
"Ante funcionarios provinciales que niegan sistemáticamente la realidad de las escuelas y en un intento desesperado de sostener lo insostenible, los docentes exigimos el corrimiento del calendario escolar que posponga la realización de mesas de examen, la presentación de los docentes en las escuelas, las asambleas", indicó Carlos Tolosa, de Unter Roca.
"Es tal la improvisación que, como están las cosas, ni siquiera se están respetando los plazos procesales para efectuar reclamos en caso de errores en los listados de la junta, listados que vinieron cargados de errores", agregó.
"Nadie sabe que vamos a decidir el lunes cuando volvamos a las escuelas y no tengamos ni lavandina para limpiar, ni vidrios en las aulas, goteras en los baños y un descuido en general que ya es inadmisible. Si hay luz, no hay foco; no hay ni gas para tomar un café", denunciaron los directivos. "Pero tampoco hay papelería, no hay escobillones, lavandina".
"La crisis del sistema educativo se agravará si no se incrementa el presupuesto de acuerdo al aumento de la matrícula y sus necesidades", agregaron desde Unter. "Los trabajadores advertimos que con el Ipross cortado, con escuelas en pésimo estado y con semejante atraso salarial, el ciclo 2002 está en riesgo de no iniciarse por exclusiva responsabilidad del gobierno provincial".
Sandra Schieroni es la titular del CEM 43 del barrio 827 viviendas de Roca, un edificio que a poco más de siete años de inaugurado no necesita hoy más que un rápido recorrido de cinco minutos por su interior y exterior, para dejar la inevitable sensación de devastación.
Más del 80% de los vidrios están rotos, la mitad de los calefactores está fuera de uso, está cortado el gas, solo en el último mes fueron robados del establecimiento puertas, matafuegos y un radiograbador y hasta sufrieron un incendio que afectó todo el frente del edificio, inundado de yuyos y viejos pastizales. Como si eso fuera poco, el cerco perimetral lejos de proteger se ha convertido en uno de los motivos de más preocupación. Derribado y con los barrotes de hierro apuntando directo a la inseguridad física de los más de 650 chicos que allí estudian, parece esperar paciente el inicio de las clases. Como esta escuela, decenas más. En Regina, Río Colorado, Catriel, Valle Medio, Cipolletti.
Es en este escenario que los docentes plantean sus exigencias. "No deberíamos iniciar las clases, porque nosotros no somos los responsables de haber llegado a esto. Pero a la vez, es la única forma de exponer lo que está pasando, que los padres vean en las condiciones en que van a estudiar sus hijos", aseguró Isabel de Herrera, una de las docentes que tiene que ayudar a tomar la decisión de comenzar las clases o no. Ese es el dilema de la mayoría de los maestros que debaten por estos días las medidas a seguir. (AR, AV, AVR y AVM)

Cunde fuertemente el desánimo

"El estado de desanimo y desesperanza es total", reconocieron los docentes de Valle Medio. Desde la Unter local se informó que los docentes continuarían con la retención de servicios como forma de reclamo ante el atraso salarial. Anoche se realizaba en Luis Beltrán una asamblea general para determinar los pasos a seguir.
"El panorama es complicado en todo el Valle Medio", mencionó la delegada de la zona Mary Ramos. Y detalló, en coincidencia con algunos directivos, en denunciar el corte de algunos servicios esenciales en las escuelas de la región.
"Está difícil la pelea", reconoció una directora de Choele Choel, quien remarcó que además de no estar cobrando, "si vamos al paro, vamos a seguir sumando descuento. En definitiva, agregamos más pobreza a la que ya tenemos. En fin, son los tiempos que corren".

Con los padres, "sí o sí"

La seccional Unter de Regina convocó a todos los docentes a participar de una concentración a realizarse hoy en la Plaza de los Próceres a las 10 y a las 16.
Alicia Valverde -directora de la escuela 279-, Alicia Gerónimo -directiva de la escuela 257- y Sandra Azcón -directora de la escuela 316-, coincidieron en apuntar que "el ánimo con que se inician las actividades es terrible, porque todos los docentes sumamos dos meses sin cobrar. Este maltrato genera mucha preocupación y malestar al no tener certezas sobre el cobro".
Agregaron que si bien no hubo contacto con los docentes en las escuelas, sí se dieron charlas informales, donde en muchos casos adelantaron que saldrán a reclamar por la educación pública, donde los padres tienen que estar sí o sí".

Foto: Desazón. Aunque muchos docentes de Bariloche aludieron a la "responsabilidad" de mantener las escuelas abiertas, finalmente se impuso la idea de "transferir hacia arriba" la ingrata tarea de dar la cara.