Lunes 4 de febrero de 2002

 

Cada vez menos neuquinos usan micros urbanos

 

Un informe de la Sindicatura revela que diciembre fue un mes negro para el servicio de colectivos en la ciudad. La cantidad de pasajeros y los ingresos económicos bajaron bruscamente.

  NEUQUEN (AN).- Diciembre fue el peor mes del transporte urbano de pasajeros de los últimos dos años. Cayó en picada libre y dejó tambaleando a Indalo, un cóctel peligroso que puede dejar a Neuquén sin colectivos y apremia al municipio a tomar previsiones para eventualmente hacerse cargo del servicio.
Cada vez menos usuarios suben al micro: en diciembre cayó a un 19% respecto al mismo mes de 2001 y a un 24% con respecto del mismo mes de 1999.
La evolución en números de la concesión es fatal y no es menos desde una mirada empresaria, pues registra un quebranto de 156.000 pesos mensuales y que el subsidio municipal atenuaría a 114.000 pesos, una cifra alta de todos modos.
Palabras más, palabras menos, esta advertencia la hace la Sindicatura en un documento que circula entre los concejales y en el gobierno municipal.
Del informe se desprende que no queda margen de juego y encomienda al intendente Horacio Quiroga que adopte las acciones administrativas y legales necesarias que garanticen la continuidad del servicio público eventualmente lesionado. Y que planifique a la brevedad un plan operativo de contingencia para ser aplicado en caso de que deba hacerse cargo directamente del servicio por un período de tiempo.
Una recomendación similar dio la Sindicatura a la anterior administración cuando el servicio de recolección de basura a cargo de Cliba estuvo por colapsar, lo que permitió a las autoridades salvar la prestación del servicio.
El organismo de control de las cuentas públicas formula una tercera recomendación que ya está haciendo el municipio, si bien con las fechas legales vencidas. Es reformular las condiciones de la concesión, en forma provisoria, con el fin de garantizar la prestación hasta tanto exista un marco económico cierto que permita establecer pautas claras y estables para el resto del período concesionado, hasta noviembre de 2008.
Este propósito tiene la reunión autoconvocada por los cuatro bloques de concejales -Alianza, MPN, ARI y PJ- para hoy pero no hay certeza qué evaluarán, si la propuesta oficial o el ultimátum de Indalo, que impone más condiciones y amenaza con iniciar juicios y declarase en "libertad de acción" si no son aprobadas antes del miércoles.
En esa expresión deja flotando el fantasma de dejar el servicio en manos de la municipalidad.
La Sindicatura arriba a esta conclusión en función de registros de Indalo, las nuevas medidas económicas, correcciones y la aplicación de las principales variables en la estructura de costos de la ordenanza que obliga a la comuna a revisar el precio del boleto cada dos años.
El informe es revelador en otro aspecto: hasta octubre del año pasado la empresa registraba un leve superávit con la ayuda municipal.
Pero los cambios económicos posteriores impactaron negativamente sobre el flujo financiero de la empresa, situación que profundizó la caída de los pasajeros transportados que pagan el boleto pleno de primera a cuarta sección.
La nueva relación entre el incremento de costos y la baja de los ingresos sería inviable en el actual esquema de concesión. Frente a esta situación y en el marco de la emergencia económica general, los síndicos creen "razonable suponer que la prestación del servicio se verá comprometida, agravada por la emergencia financiera que atraviesa el municipio" que hace a su vez hace imprevisible pronosticar por cuánto tiempo más puede la comuna sostener el subsidio de 41.600 pesos al servicio.
   
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