Martes 22 de enero de 2002

 

Hallan en el fondo de un lago al cocinero buscado

 

Se habría desbarrancado en el Moreno.
Había anunciado que se iba a quitar la vida.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los malos presagios sobre el paradero del cocinero Hugo Gaitán se confirmaron el domingo por la tarde, cuando la policía ubicó en la costa del lago Moreno el lugar donde había caído la camioneta Kangoo que habitualmente conducía.
Si bien el vehículo había quedado sumergido a unos 20 metros de profundidad y no podía avistarse desde la costa, era evidente el callejón que había abierto entre el follaje, por el terraplén de casi 50 metros que desciende desde el camino Viejo que conduce a Colonia Suiza.
"Todo hace suponer que el desenlace fatal se produjo de manera voluntaria poco después de que Gaitán fuera visto por ultima vez en un restaurante de Colonia Suiza, donde le habría advertido a una camarera que se trataba de su última cena, pero tomando en consideración que el hombre había bebido y las peligrosas curvas existentes en ese camino, tampoco puede descartarse de manera definitiva la hipótesis del accidente", aseguró una fuente ligada a la investigación.
Gaitán tenía 47 años y se había desempeñado como cocinero en la mansión que el millonario norteamericano Joe Lewis posee junto al Lago Escondido, cerca de la localidad de El Manso. Allí había conocido a su segunda pareja, que se desempeñaba como ama de llaves del establecimiento, pero hace varios meses dejó de trabajar allí, y su compañera se trasladó a Orlando, en los Estados Unidos, para desempeñar las mismas funciones en otra propiedad de Lewis.
Ultimamente, la víctima utilizaba su Renault Kangoo para repartir galletitas, y estaba construyendo una casa en el kilómetro 15 de la avenida Bustillo. Sin embargo sus estados depresivos eran cada vez más frecuentes y el tratamiento psicológico y psiquiátrico al que había recurrido tampoco hizo cambiar su ánimo. Su consuegro, Máximo Renkine, comentó que las profesionales lo definían como un suicida en potencia, y al conocer el domingo su paradero no tuvo dudas de que Gaitán había ejecutado su último acto en forma voluntaria.
Renkine es el mismo que denunció la desaparición de Gaitán con fundamentada preocupación, aunque siempre mantuvo encendida una luz de esperanza, relacionada con anteriores reapariciones luego de ausencias injustificadas. También fue el que supo que a las 18.30 del 11 de enero había estado en la casa de unos amigos en el Llao Llao, donde ingirió una botella de vino y anunció su decisión de matarse.
La policía estableció que esa misma noche Gaitán había cenado en un restaurante de Colonia Suiza, donde habría invitado a comer a una camarera anunciándole que era su última cena. La mujer recordó muy bien al hombre maduro de 1,90 de estatura que le había hecho el funesto comentario, a menos de dos kilómetros del sitio donde encontró la muerte.
En ese lugar hay un guard rail para proteger a los automovilistas, pero el auto de la víctima se precipitó desde el final de ese medio de contención, sin tocarlo, y cayó unos 50 metros, directamente en el lago, luego de quebrar las copas de algunos pinos a su paso.

Foto: Hugo Gaitán fue encontrado por personal de Prefectura, bajo el agua y a unos 20 metros estaba su utilitario

   
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