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Diálogo: todos buscan garantizar la paz social
Duhalde recibió el primer informe que refleja avances en la tan ansiada concertación. Los obispos encargados del diálogo destacaron que los encuentros con diversos sectores fueron fructíferos, se está gestando un "lenguaje en común" y todos coincidieron en dos puntos: concentrar esfuerzos para garantizar la paz y pedir a Remes Lenicov que ayude en el intento.
El grupo también le planteó al ministro Remes Lenicov, en una reunión informal, que además de considerar las variables económicas haya una "mayor comprensión social" a la hora de los anuncios y le sugirieron que se evitaran "las marchas y contramarchas".
Voceros eclesiásticos visitaron a Duhalde en Olivos aunque se pretendió dejar sentado públicamente que es el jefe de Estado quien "conduce y supervisa" la concertación, que cuenta con el apoyo de la Iglesia y los equipos técnicos del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.
Fue así que a su término se anunció la incorporación del senador justicialista Antonio Cafiero al equipo de asesores que ya integran los obispos Jorge Casaretto, Juan Carlos Maccarone y Ramón Staffolani, el diputado José María Diaz Bancalari, el jefe de gabinete Juan Pablo Cafiero, y el diplomático de la ONU, Carmelo Angulo Barturen.
Si bien en la ronda de conversaciones es "inevitable" referirse a cuestiones coyunturales -como las restricciones bancarias, la emergencia alimentaria, los subsidios de inclusión social y el presupuesto-, un obispo confió que el objetivo "prioritario" de la mesa es "restablecer la idea de bien común".
Además en la sede de Cáritas se refirió a Gustavo Béliz, quien destacó la importancia del diálogo pero exigió "pensar cómo salir del corralito". También pidió que el Banco Central se transforme en una entidad matriz de "recursos sociales" y dijo haber entregado un proyecto para "poner en marcha el sistema productivo".
Al término de la reunión con Duhalde, el vocero José Ignacio López, señaló que el presidente se manifestó "agradecido y esperanzado" en que la concertación arroje resultados fructíferos que permitan sacar al país de la grave situación en la que se encuentra. López sostuvo que la "demanda unánime de los participantes del diálogo es recuperar la paz social, así como un profundo deseo de participación".
Por la tarde, la comisión integrada por Juan Pablo Cafiero, Díaz Bancalari, Barturen, Casaretto y Maccarone se trasladó a Economía donde se entrevistaron con Remes Lenicov.
En el encuentro, se analizó la situación económica actual y los obispos plantearon que la sociedad "reclama mayor flexibilidad del corralito" que, precisaron, "es un reclamo de los participantes".Otro de los puntos que obispos plantearon fue la necesidad de implementar una reforma impositiva y del Estado y de reinsertar al país en el mundo.
Durante el fin de semana, los integrantes de la comisión del Diálogo mantendrán reuniones reservadas en las que evaluarán lo realizado hasta hoy.
El lunes tienen previsto reunirse con los embajadores de los países de la Unión Europea en Buenos Aires, representantes de la Sociedad Rural, de las PyMEs, del Movimiento de Jubilados y Pensionados y de la Corriente Clasista y Combativa. (DyN)
El primer informe
Una de las cartas con las que juega Duhalde es la de la " Concertación". Por ahora una senda posible de diálogo, aun por recorrer junto a todos los sectores, tendiente a construir el consenso que no le dieron las urnas para llegar a la presidencia.
El primer informe muestra resultados que evaluaron positivamente, aunque aun resta la opinión y participación de sectores claves y aun no pueden traducirse en resultados concretos para el gobierno.
Duhalde recibió ayer un pormenorizado informe de la Mesa coordinadora del diálogo multisectorial en el cual se destaca "una demanda unánime para recuperar la paz social".
Así lo manifestó el vocero de la Mesa coordinadora y asesor de las Naciones Unidas, José Ignacio López. Explicó al respecto que en el diálogo emprendido se utiliza una "metodología de acuerdo, con una matriz de la ONU, que es identificar dónde aparecen coincidencias y dónde las disidencias".
López evaluó como "positivos" los resultados de las conversaciones "cuyas condiciones están fijadas y establecidas en los últimos documentos de la Iglesia". Destacó que "se ha querido comenzar por los sectores más afectados por la crisis" aunque se negó a reconocer que en los encuentros participaron otros fantasmas, como los que traen el temor a nuevos estallidos.
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