Viernes 11 de enero de 2002

 

El granizo causó graves daños en Río Colorado

 

Más del 80% de la producción fue afectado.

  RIO COLORADO (ARC).- Los productores frutihortícolas de Río Colorado despertaron ayer con la esperanza de haber vivido una pesadilla colectiva y que todo lo que cayó del cielo en la tarde-noche del miércoles haya sido una ilusión óptica. Sin embargo, las primeras luces le mostraron una dura realidad. La cosecha que estaba a punto de recolectarse había sido destruida en gran parte por la pedrea y el granizo.
El fenómeno comenzó con ráfagas de viento que superaron los 100 km/h, luego cayeron "piedras" con una diámetro superior a los 8 centímetros y más tarde continuó el granizo común durante cinco minutos.
La violencia de la pedrea -en particular las primeras, más grandes y en seco- también provocaron daños en el radio céntrico de la ciudad.
El panorama en colonia Juliá y Echarren era desolador. Las calles estaban cubiertas por las ramas arrancadas de los álamos, una veintena de postes que llevan distintos servicios derribados y un par de transformadores de electricidad en el piso.
Dentro de las chacras el escenario era similar. Durante la recorrida realizada se vio mucha fruta caída y destrozada. La que estaban en la planta también quedó marcada. La estimaciones iniciales hablan de un 80 a 90% de la producción dañada.
El ánimo de los "chacareros" estaba por el piso. Después de todo un año difícil en materia económica, estaban a punto de cosechar. "Aunque hubiera cosecha no nos salvábamos, pero íbamos a comer. Imaginate ahora", indicó un productor.
El secretario de Fruticultura, Jorge Chiófalo, se hizo presente en esta localidad y junto a autoridades comunales recorrieron distintos montes frutales. El funcionario reconoció que la mayor parte del aparato productivo de la colonia había sido afectado y que a partir del lunes se comenzarían a confeccionar las declaraciones juradas de daños.
La horticultura también fue afectada y lo único que se salvó fue la papa.
El presidente de la Cámara de Productores, Rubén Pérez, afirmó que por la cantidad de chacareros que se llegaron hasta el organismo de distintos puntos de la colonia, el daño es enorme. "Se calcula que el porcentaje de fruta afectada estaría alrededor del 80%, porque cayó piedra y granizo en toda la colonia sin excepción. Ahora los productores necesitamos ayuda para llegar a la cosecha del año que viene y lamentablemente es plata".
"La fruta que está afectada va directamente a la juguera pero la manzana golpeada no creo que la vayan a recibir porque le falta mucha cantidad de azúcar", agregó.
Luis Agudo, productor de la colonia, dijo: "La fruta que agarró (la pedrea), la rompió. La mitad quedó en el piso y de la que quedó en la planta, veremos en unos días". Por su parte Daniel Dietrich que produce en la costa del monte, indicó que hay daños pero no como en el centro de la colonia.

No se recuerda algo parecido

Los vecinos más memoriosos no recuerdan algo parecido.
El tamaño del granizo y la violencia con la cual caía, causaron temor en todo Río Colorado.
Muchos toldos de comerciantes, carteles publicitarios, techos y vidrios que por su posición se encontraban de frente a la tormenta, fueron arrasados y perforados, como también fueron arrancados de cuajo árboles y postes.
Los vehículos no fueron ajenos y sufrieron las consecuencias. Los parabrisas resultaron astillados y la carrocería de muchos rodados mostraban abolladuras profundas.
Datos recogidos indicaron que algunos turistas que fueron sorprendidos en la ruta 22 ingresaban a las estaciones de servicios buscando refugio -con los vehículos dañados- asustados y desorientados.

Mucho trabajo para los municipales

Los empleados municipales tuvieron mucho trabajo en la jornada de ayer tratando de ordenar la ciudad que presentaba un aspecto desconocido, como si hubiera pasado algo más que una tormenta.
Una mujer que se encontraban en la calle al momento del vendaval comentó "parecía que Dios estaba enojado", intentando encontrarle una explicación a lo sucedido. (ARC)

Zarpa hoy el primer buque de la temporada desde San Antonio

SAN ANTONIO (ASA)- Hoy zarpa hacia Bélgica, cargado con 3.800 pallets de pera William"s, uva, ciruela y nectarín, el primer buque de la temporada 2002.
Con inquietud los exportadores se disponen a iniciar los envíos de fruta hacia el exterior. La actual situación económica produce incertidumbre acerca de cómo se desarrollarán las exportaciones. Por lo pronto, ayer desde las 9 de la mañana hasta pasado el mediodía y desde las 19 hasta la mañana de hoy, se cargó el Cap Triunfo.
En tanto, en rada exterior aguarda desde el domingo último el English Star, de bandera de Bahamas, de 150 metros de eslora, que cargará un total de 3.800 pallets de fruta hacia Europa. Desde el martes, permanece frente al balneario Las Grutas el Mahome Bay, que llevará 4.000 pallets también hacia el Viejo Continente.
Para mañana está anunciado el ingreso a rada del Iberian Reefer, que cargará 300 pallets también hacia Europa. A partir de ese ingreso está casi confirmada la llegada incesante de otros 5 o 6 buques para enero.
El ingreso de camiones con fruta a la zona portuaria se desarrolla con cierta lentitud hasta tanto se aceiten los mecanismos de la actividad que se inicia con la cosecha, continúa en los galpones de empaque y termina en las bodegas de las enormes naves mercantes del puerto.
Desde la Terminal de Servicios Portuarios Patagonia Norte se informó que recién a partir de febrero estará en funcionamiento la sala de transferencia, que permitirá una mayor agilidad en la carga y descarga de buques. Las grandes instalaciones fueron construidas recientemente y permiten alojar allí un importante stock de fruta, lo que acelera el ir y venir de camiones entre la estación marítima y los galpones de empaque valletanos.
Actualmente una flota de 150 vehículos contratados por Patagonia Norte empezaron a transitar las rutas de la región con diferente suerte. Algunos no pudieron recibir la carga en algunos sitios del Valle Medio por la falta de madurez de la fruta o la falta de frío ya que la cosecha es muy reciente. Otros van cumpliendo su recorrido como se esperaba.
Actualmente trabajan en la empresa portuaria unas 200 personas de planta permanente y se contrataron unos 35 empleados temporarios.
La mayor parte de la carga del Cap Triunfo consiste en fruta que estaba almacenada en los frigoríficos de Patagonia Norte, mientras que una parte más reducida corresponde a la pera recientemente cosechada en Mendoza y Valle Medio.
Recién para la próxima semana se aguarda el ingreso de pera Williams desde el Alto Valle. Como todos los años se estima que desde el comienzo de la temporada hasta el final -que se da entre fines de mayo y mediados de junio- ingresará algo más de un centenar de barcos mercantes.
   
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