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Miércoles 12 de diciembre de 2001 | |
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Quieren garantizar obras para evitar el efecto de crecidas en la región |
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Diputados cipoleños piden que parte de las regalías hidroeléctricas se destine a defensas urbanas y suburbanas |
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| CIPOLLETTI (AC).- La afectación de dinero del Fondo Hidráulico para la realización de obras aguas abajo de las grandes represas, que eviten daños por crecidas de ríos en plantaciones y localidades ribereñas, y también para instrumentar vías de escape frente a eventuales colapsos, fue planteada en la Legislatura mediante una presentación de los diputados cipoleños Guillermo Grosvald y Hugo Medina. Esto, cumpliendo con uno de los mandatos de la multitudinaria asamblea cívica que se llevó a cabo tiempo atrás en el Club Cipolletti, donde se evaluó la situación y se concluyó sobre la necesidad de varias obras. El Fondo Hidráulico se integra con 24 millones de pesos anuales que recibe la provincia en concepto de coparticipación por regalías hidroeléctricas. El manejo del fondo corre por cuenta del DPA y el proyecto instaló la necesidad de que parte de ese dinero se aplique en obras de atenuación de crecidas y puentes y caminos que garanticen la seguridad de la gente si se produjera una grave deficiencia, o una ruptura, en alguno de los grandes complejos asentados sobre los ríos Limay y Neuquén. Por la iniciativa se propone una modificación de la ley 2952 -conocida como "Código de Aguas"- en su artículo 244, inciso b). La modificatoria hace alusión concreta a "obras que mitiguen el efecto nocivo de las aguas en las áreas urbanas y rurales". Para los legisladores en la mencionada ley "nada se dice, con claridad, sobre el destino (de divisas) sin reintegro para la construcción de obras que atenúen el riesgo asociado a las áreas urbanas y rurales aguas abajo de las presas". Cumplimentando otro de los mandatos de la asamblea, los legisladores proponen que para esas obras debe realizarse una complementación con las municipalidades, el ORSEP, la Autoridad de Cuencas y Defensa Civil, entre otros organismos. El fenómeno -las crecidas, los potenciales riesgos por colapsos- "crea en la población una situación de stress. Más aún cuando lo que es un estado de riesgo se transforma, casi todos los años, en un daño de magnitudes variables para los pobladores", dicen Grosvald y Medina. Ponen de relieve además que la dimensión de los efectos de la crecida del año en curso, con un efecto grave en las riberas, "lleva a analizar la eficacia de la normativa vigente", por lo que sostienen la necesidad de una mención concreta sobre la construcción de obras mediante el fondo en cuestión. |
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