Lunes 10 de diciembre de 2001

 

"El turismo es una herramienta para repuntar"

 

La balanza está del lado de Argentina, asegura Lombardi. El turismo interno será el que
marcará la diferencia. Se esperan 250.000 visitantes adicionales para la Patagonia.

  BUENOS AIRES (ABA).- Admite que el país está en crisis y reconoce: "estamos al borde del precipicio". No pretende disimular el hecho de que la situación económica de los argentinos es apremiante y que la recesión de los últimos cuatro años no da respiro a los empresarios. Pero el hombre tiene una carta que jugar. Y confía en que este verano hay una posibilidad concreta para torcer la suerte y comenzar a ganar la partida.
"La balanza está de nuestro lado. Después de los atentados del 11 de septiembre y de la guerra, el turismo es para nuestro país una de las principales herramientas para comenzar a repuntar el estancamiento económico en el que estamos. Y cuando cerremos la temporada y veamos los números, me van a dar la razón".
El ministro de Turismo Cultura y Deportes de la Nación, Hernán Lombardi, pronuncia esas palabras sentado en su viejo despacho de secretario: el sitio desde donde proyectó semejante crecimiento para el sector que lo llevó a ocupar un lugar en el gabinete presidencial.
Los pronósticos que su equipo de trabajo hicieron en las últimas semanas y que él presenta con una convicción inusitada no son menores: para la Patagonia se esperan entre diciembre y marzo más de 250.000 turistas adicionales a los aproximadamente 500.000 que la visitan regularmente.
Y los primeros signos que avalan la tendencia fueron corroborados en parte durante un encuentro del sector realizado en Londres siete días atrás (ver aparte).
¿Es posible pensar que el sector turístico tiene la capacidad de reactivar la economía?
Nosotros confiamos en que así sea.
La economía de los viajes y el turismo es la más importante de la tierra. Hay un promedio de 700 millones de viajeros internacionales por año, que generan 450 mil millones de dólares de ingresos para los principales países receptores. Y hoy, que el mundo entró en guerra, nosotros tenemos la oportunidad de captar una importante porción de ese mercado ya que contamos con los recursos naturales apropiados para hacerlo. Tenemos que confiar en que podemos salir adelante.
¿Realmente cree que puede ser una salida a la crisis?
La Argentina tiene que decidir cuáles son sus herramientas productivas. Adonde puede competir bien.
Primero tuvimos la agricultura y después la revolución industrial. Y así nos fue. Por eso, tenemos que apostar a lo nuevo, que son los productos turísticos, donde somos verdaderamente competitivos.
El turismo permitió un crecimiento sostenible a distintos países, como España, que era la cenicienta de Europa y que gracias a la puesta en marcha de un plan turístico que defendió durante 20 años ahora es una de las principales potencias mundiales.
¿Se espera un gran movimiento interno para esta temporada?
El turismo interno es principalmente el que va a marcar la diferencia.
Los argentinos que se iban al exterior van a elegir como principal destino a la Patagonia, porque es el principal sustitutivo de productos como Europa o Estados Unidos en estos momentos en que la gente no quiere volar hacia el extranjero por temor. Los sectores que optaban por esos viajes, cambiarán de rumbo.
No perdamos de vista que en la temporada casi 3.000.000 de argentinos se van al exterior, y que de ese total muchos irán hacia el sur. Pensar en que serán sólo 250 mil turistas adicionales es ser precavido.
¿Recuerda que estamos en un período de crisis extremo?
Sí, pero me remito a los números.
El cuerpo social argentino está sufriendo los embates de cuatro años de recesión. Sin embargo, bajan los precios de los vuelos, y la venta de pasajes creció en un 35% en pocas semanas.
Baja el precio de los cines, y en dos días 600.000 personas compran entradas. Eso muestra que el paciente, que está verdaderamente castigado, todavía tiene pulso.
A pesar del entorno recesivo, hay posibilidades de reactivar el consumo.
Nuestro desafío es trabajar en ese sentido de manera de que se generalice el consumo y comience la reactivación.
¿Bajarán los precios para el turismo interno?
El Plan de Competitividad del Turismo que instrumentamos hace meses apuntaba, en parte, a lograr eso.
Yo doy fe de que todos los prestadores de servicios van a colaborar para que esto sea así, de modo que todos nos veamos beneficiados.

Lucas Colonna
   
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