Rotura de presas, hipótesis del simulacro en Roca

Autoridades de Defensa Civil montaron el operativo para evaluar cómo está preparada la comunidad para casos de desastre. Hubo puntos confusos, pero buena participación vecinal.

ROCA (AR) - Sólo la hipótesis de un atentado, tal vez como los que ocurrieron en Estados Unidos el 11 de setiembre pasado o en sus diversas formas, pueden determinar la rotura de una represa hidroeléctrica en la región. Esta es al menos la conclusión a la que arribaron los ingenieros y técnicos de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas y los responsables Defensa Civil.
Todas las demás conjeturas, según sostienen los expertos forman parte del imaginario de la gente. Y reiteraron que son muy pocas las posibilidades de que un dique se rompa en forma natural, sin acciones externas.
En la tarde de ayer, las autoridades de Defensa Civil de Roca montaron un operativo para simular este tipo de desastre. La idea consistió en evaluar de qué manera estaba preparada la ciudad y todas las instituciones .
Los vecinos de los barrios Los Olivos, las 172 viviendas y Brentana ya habían sido alertados de antemano para evitar que entren en un pánico generalizado ya que las sirenas de bomberos y ambulancias iban a romper el silencio de la tarde por varias horas. Pero como la secuencia de comunicación –según el Plan de Emergencias Hídricas– va desde los concesionarios de las represas pasando por Defensa Civil provincial hasta los intendentes comunales, hubo sorpresas que ni los funcionarios presentes esperaban.
A las 17.35 sonaron cinco bombas de estruendo desde la comisaría 67 y 31 porque supuestamente en la ciudad no habría energía eléctrica. Fue el alerta rojo para comenzar el operativo de evacuación. En poco más de seis minutos las autobombas y las ambulancias llegaron a los barrios. Hubo gente que se resistió a salir y no se prestó al juego por pudor y algunos por temor a salir de sus casas y que les robaran. "Tengo otras cosas en la cabeza hoy, lo que menos me preocupa es que se rompa una represa", comentó uno de los vecinos con un poco de humor, pero al final se sumó a la iniciativa.
Las indicaciones de los coordinadores fueron cargar un bolso en la mano y salir hacia el norte de Roca por dos salidas de emergencia sobre las calles Vintter y Jujuy.
En principio la idea fue evacuar voluntariamente a 1.200 personas de los tres barrios, lo que representa el 25% por ciento de esos sectores. A medida que transcurría la tarde hubo hechos que confundieron ya que el simulacro fue tomado muy en serio por los funcionarios, ingenieros y la Policía roquense y hasta el mismo intendente Sarandría.
Es más, vecinos del lugar y periodistas quedaron desconcertados cuando una mujer, que simulaba estar embarazada fue cargada en una ambulancia y con un shock nervioso. Los enfermeros dijeron que era verdad y algunos lo creyeron. La seguidilla de simulaciones continuó con un bote de Prefectura que rescató a una persona desesperada; un hombre infartado; dos focos de incendio que obstaculizaron el despeje del área de evacuación y hasta el desalojo de un geriátrico clandestino.
Más tarde el arribo masivo al centro de operaciones donde supuestamente irían a ser atendidos los evacuados, al norte de la ciudad, cerró el operativo. Entre risas verdaderas, algunos llegaron hasta en sillas de ruedas y otras madres con sus hijos en brazos.

Factores a tener en cuenta para corregir

El balance de la simulación de rotura represas seguramente motivará a que se refuercen las medidas de primeros auxilios en los barrios y a que se afinen las comunicaciones entre la Policía y las ambulancias. Jorge Amaro, titular de Defensa Civil de la provincia sostuvo que lo más destacable fue la participación de la gente.
Lo que sí funcionó:
*La Policía y todas las fuerzas de seguridad llegaron a tiempo a la evacuación.
*Se preservó el secreto de simulacro, por lo que algunas sorpresas parecieron reales.
*La participación de la gente fue alta y en general las expresiones fueron de aprobación.
Lo que no funcionó:
*Las cinco bombas para dar aviso de la emergencia fue calificada por todos como "un fracaso". Cualquier persona que haga explotar alguna en el momento de la catástrofe podría confundir a la población.
*La comunicación entre policías y los paramédicos. Cuando una mujer se desmayó, una persona le preguntó a un alto jefe de la policía si podía llamar a un médico y éste le respondió que no tenía comunicación por el "handy".
*No hubo megáfonos. La voces de los coordinadores tienen que hacerse escuchar, hubo muchos gritos. Cuando el intendente quiso hablar para agradecer y despedir a la gente, apenas se le oía. (AR)

Foto: Las fuerzas de seguridad y la población, principales involucrados en el simulacro que adquirió momentos de gran realismo.