Miércoles 19 de diciembre de 2001

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Crece la tensión social y el gobierno lo admite

 

Protestas en distintos puntos del país

 
  Médicos y enfermeros del hospital Julio Perrando de Resistencia, Chaco, atendieron ayer a sus pacientes en la vereda, con el propósito de dejar en evidencia el estado de precariedad extrema en que se encuentra el sistema sanitario estatal, cuyos centros asistenciales se hallan desabastecidos de insumos esenciales, según denunció el gremio provincial UPCP.
La medida se inició ayer y continuará en los próximos días no sólo frente al hospital Perrando -el más importante del Chaco- sino en las salas de primeros auxilios y reparticiones de Salud Pública del Interior.
Simultáneamente, una veintena de jubilados tomó en forma pacífica la sucursal Bahía Blanca del Banco de la Provincia de Buenos Aires en reclamo del pago de haberes de noviembre y del vaciamiento del Instituto de Previsión Social. Respecto del origen de la protesta, desde el Banco Provincia se informó oficialmente que aún no estaban las órdenes de pago depositadas.
Mientras tanto, los pequeños comerciantes realizarán el jueves 27 una nueva protesta en contra del modelo económico, que incluirá "apagones, cacerolazos y bocinazos" en todo el país, anunció ayer el presidente de la Coordinadora de Actividades Mercantiles Empresarias (CAME), Osvaldo Cornide.
En la provincia de Buenos Aires, por otra parte, los docentes anunciaron que no comenzaron a sus clases y el gobierno reforzaba la seguridad en supermercados y alertó a la Guardia de Infantería ante posibles desbordes sociales. (DyN)

Las clases no se reanudarán

La secretaria general de Ctera, Marta Maffei, repudió ayer la decisión del Gobierno de eliminar el Fondo de Incentivo Docente y advirtió que, en estas condiciones, el ciclo lectivo 2002 no va a comenzar cuando corresponde. La líder sindical detalló que la eliminación del fondo de incentivo implicará rebajas que van desde el 15 al 25 % en los salarios de los docentes por lo que indicó que la situación que se presenta para los trabajadores de la educación es "de muchísima preocupación".
Pero Maffei no fue la única en manifestarse contra el ajuste en el sector, la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU) convocó a un paro por 48 horas en las universidades públicas ante la falta de pago de sus sueldos de noviembre.
Los rectores de las 36 universidades públicas y 4 institutos superiores nucleados en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), por su parte, intimaron ayer al ministro Cavallo a que regularice inmediatamente el pago de los sueldos de noviembre para el personal de las casas de altos estudios y exigieron a Cavallo además el envío del dinero adeudado desde julio último a las universidades y además pidieron que mantenga "como mínimo requerido partidas presupuestarias análogas a las de la ley de Presupuesto 2001 para el 2002". (DyN, Télam)

     
     
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