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¿Es posible una negociación sin Arafat?
Israel sostiene que no intenta derrocar a Arafat y a su Autoridad Palestina, pero Arafat afirma que él es el blanco. Arafat, quien fue electo presidente palestino en 1996 y tiene ahora 73 años, no ha preparado un sucesor. Algunos analistas políticos dicen que eso podría significar que estaría muy lejos una sucesión sin problemas e Israel teme que se desate una caótica -y violenta- lucha por el poder.
Pero muchos analistas afirman que el liderazgo que eventualmente surja probablemente seguiría las políticas clave de Arafat, que tienen como objetivo el establecimiento de un estado palestino independiente, y que los ataques a Israel por grupos militantes islámicos podrían incrementarse.
"No espero que se registren cambios dramáticos después de Arafat. Habrá una continuidad de su política con la excepción de un nuevo liderazgo, que sería más débil y tendría una posición menos flexible en las negociaciones", dijo el analista político palestino Ghassan al-Khatib. "Y debido a que el nuevo liderazgo no tendría la legitimidad que tiene Arafat, por lo cual sería más débil, los movimientos islámicos sacarían ventaja de la sucesión para cambiar más el balance de poder incrementando los ataques contra Israel", añadió.
Danny Rubinstein, comentarista del periódico israelí Ha"aretz, dijo que cualquier líder posterior a Arafat probablemente encontrará más dificultades para negociar un acuerdo de paz con Israel. Agregó que las generaciones de jóvenes palestinos asumirían una línea más dura y no tendrían la legitimidad de Arafat. "Espero que Arafat alcance un pacto con Israel porque le daría legitimidad al convenio. Sin Arafat, el conflicto durará muchos años", dijo
Arafat ha enfrentado un creciente desafío a su popularidad por parte del movimiento islámico Hamas desde que los palestinos comenzaron un levantamiento contra la ocupación israelí en septiembre del 2000 tras el estancamiento de las negociaciones de paz. Hamas, que no reconoce el estado de Israel, organizó los ataques suicidas en Jerusalén y en el norteño puerto de Haifa, donde murieron 26 personas, en respuesta al asesinato por los israelíes de uno de sus más altos líderes militares, Mahmoud Abu Hanoud. Israel responsabilizó a Arafat de los ataques y respondió bombardeando Gaza y destruyendo sus helicópteros.
El debate ha sido intenso en Israel sobre si se debe usar la fuerza abrumadoramente superior del estado judío para derrocar a Arafat. Las opiniones están divididas porque muchos funcionarios israelíes temen que su salida incremente el caos. También Washington se opone a que Arafat sea desplazado del poder.
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha expresado pocas simpatías por Arafat desde hace tiempo, aunque niega que quiera derrocarlo. Esta semana dijo: "Creo que hay líderes (palestinos) más pragmáticos con quienes podríamos alcanzar un acuerdo".
Arafat ha sido líder y símbolo nacional de los palestinos desde 1969. Es jefe del gobernante movimiento Fatah de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), presidente de esta y también de la Autoridad palestina.. También ostenta los cargos de ministro de Defensa, ministro del Interior y cabeza general de las fuerzas de la OLP. Ningún sucesor tendría todas esas posiciones.
Arafat es hoy la persona más flexible y pragmática entre los palestinos, aunque su nivel de popularidad haya caído en las encuestas. Y el resentimiento también se he incrementado, en parte contra Israel y en parte contra la Autoridad Palestina, porque la firma de los acuerdos interinos de paz de 1993 han hecho muy poco por mejorar los niveles de vida entre los palestinos y debido a que siguen aumentando los rumores sobre corrupción entre funcionarios palestinos.
Pero los palestinos dudan de que haya alguien mejor que Arafat para alcanzar la paz. Aunque se la ha pedido a Arafat que haga más por controlar a los militantes y es criticado en Israel por rechazar los términos de un convenio de paz, muchos analistas dudan que Sharon esté preparado para emprender los pasos necesarios que permitan garantizar un acuerdo de paz. "Creo que Sharon es quien no quiere que haya ningún acuerdo con Arafat. No quiere acuerdo de ningún tipo porque no quiere hacer concesiones", dijo Rubinstein. (Reuters)
Los sucesores no convencen
Funcionarios palestinos dicen que Arafat e Israel comparten las responsabilidades por la falta de un obvio sucesor.
Durante su poder autocrático, Arafat se ha opuesto a edificar instituciones y no ha designado un sucesor. Por su parte, Israel ha matado a algunos de los más carismáticos líderes de la OLP.
Khatib dice que la OLP y la Autoridad Palestina pueden asegurar una tranquila transición al principio. Bajo las reglas de la OLP, Mahmoud Abbas, de 65 años, un miembro veterano del Comité Ejecutivo de la OLP y co-fundador de Fatah, también conocido como Abu Mazen, emergería para liderar la OLP.
Bajo una ley no ratificada, Ahmed Korei, presidente del Consejo Legislativo Palestino, asumiría temporalmente la presidencia de la Autoridad Palestina y llamaría a elecciones en 45 días. Tiene 63 años y es más conocido como Abu Ala.
Ninguno, Abu Ala o Abu Mazen, tiene amplio respaldo del pueblo palestino.
Otros posibles sucesores incluyen a Jibril Rajoub, de 48 años, jefe del Servicio Preventivo de Seguridad en Cisjordania, y Mohammed Dahlan, de 41, del Servicio Preventivo de Seguridad en la Franja de Gaza. En ausencia de un ejército, ambos representan lo más cercano que tiene la ANP a jefes militares.
Otro candidato es Marwan Barghouthi, de 42 años, una de las figuras más populares del levantamiento palestino y un veterano líder de Fatah.(Reuters)
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