Una sobreviviente había visto una pareja sospechosa frente a la AMIA
"Antes del atentado salí del edificio, crucé Pasteur hacia Viamonte y paré a ver cómo se veía la fachada reciclada. La miré a la distancia y al lado mío había un hombre y una mujer que también miraban y tomaban nota de algo", reveló hoy Satz, quien nunca antes declaró en la causa y fue convocada por abogados del grupo de familiares "Memoria Activa".
La testigo, que dejó la mutual judía a fines del "94, no pudo precisar qué día ocurrió esto pero calculó que fue entre "dos días y una semana" antes del ataque terrorista que la encontró en su lugar de trabajo, aunque sólo sufrió heridas leves.
"Después de la explosión me acordé de lo que había visto y me llamó la atención, pero es un recuerdo leve; lo único que puedo decir es que la mujer podría tener cabello ondulado y que los vi por la tarde, tipo 16.30", concluyó.
Sobre el 18 de julio de 1994, Satz recordó que "a diferencia de muchos que dicen que escucharon un gran ruido, yo escuché un silencio. Mi oficina se cayó. El edificio quedó cortado por la mitad".
Satz fue la segunda testigo en lo que va del juicio que refirió haber visto gente extraña en la zona antes de la voladura: el encargado de un edificio vecino, Carlos Heindenreich, contó a los jueces hace más de un mes que el viernes anterior al atentado vio un hombre "que parecía árabe pero vestido como brasileño" mirando hacia Pasteur 633, apoyado en una caseta telefónica.
También declararon ayer empleados y sobrevivientes, como Jorge Beremblum, quien refirió que días después del ataque recibió un llamado telefónico en su casa donde "una persona que hablaba un árabe gringo" lo amenazó con fondo de "música y risas".
Ayer otro empleado de la mutual, Mario Liberman, contó que llamados de ese tenor fueron recibidos por él y otros de sus compañeros.
Abraham Sokolowicz, polaco, actual psicólogo y ex empleado de prensa de la DAIA durante 32 años, habló sobre una puerta interior que comunicaba Pasteur 633 con el 611.
Esta abertura dio lugar a hipótesis defensistas sobre un posible lugar por donde pudieron introducirse explosivos.
Hoy, la pista iraní
BUENOS AIRES (DyN) - El comisario bonaerense Jorge Avesani, quien fue actor y guionista del envío televisivo "Poliladron", será interrogado hoy como testigo por el juez federal Juan José Galeano, que investiga a un grupo de iraníes que residió en una casa de Vicente López hasta el 18 de julio de 1994, cuando se produjo el atentado a la AMIA.
Galeano intenta completar distintas líneas de investigación sobre la masacre, y en ese marco convocó a declarar a habitantes de Vicente López, en la zona norte del conurbano bonaerense, que fueron vecinos de los iraníes que, misteriosamente, desaparecieron de su barrio en los días del atentado.
Avesani declarará hoy porque, como comisario de la seccional 4ta. de San Isidro, recibió los primeros datos sobre los movimientos en la casa de los iraníes, situada en Tapiales 1420.
Sin embargo la vivienda fue allanada con cuatro años de demora respecto de las primeras sospechas, pese a lo cual en el lugar sólo se encontraron recortes periodísticos sobre el caso AMIA, pasaportes de diplomáticos iraníes y el contrato de locación de un departamento muy próximo al edificio de la calle Arroyo de esta capital donde funcionó la Embajada de Israel.
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