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Sábado 29 de diciembre de 2001 | |
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Allanan el casino de Viedma e inhabilitan máquinas |
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La medida se dispuso por una causa de presunta retención indebida de artefactos. |
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| VIEDMA (AV)- La justicia allanó el casino de Viedma e inhabilitó las máquinas tragamonedas. Por la presunta retención indebida de esos artefactos, el juez penal de esta capital, Jorge Bustamante, ordenó ayer el allanamiento de "Golden Valley", ubicado en cardenal Cagliero y Vallese, y el secuestro de 55 tragamonedas. Ante la imposibilidad técnica de retirar las máquinas, por estar fijas al piso, se colocaron fajas de clausura en cada una de ellas a los efectos de evitar su utilización hasta tanto se puedan retirar del local. La orden judicial está vinculada a una denuncia penal presentada por la empresa Pradión S.A., con sede en Buenos Aires, contra la firma Varsa, concesionaria de las máquinas. La empresa bonaerense reclama la restitución del total de los tragamonedas, que serían 70, de los cuales ayer se inhabilitaron 55 en Viedma. Según se supo, las restantes se encuentran en el casino de Cipolletti y no se descarta que el mismo juez Bustamante disponga más adelante y por exhorto a esa localidad, la misma medida ordenada ayer en Viedma. Los abogados denunciantes confiaron en que en un breve plazo el magistrado interviniente resuelva el traslado y la devolución de las máquinas "al legítimo propietario". En la denuncia penal presentada, el ex juez del STJ Jorge Luis García Osella, apoderado de la empresa Pradión S.A., planteó que la firma en su función de gerenciadora de Varsa adquirió 90 tragamonedas con el fin de entregarlas a esta empresa con el compromiso de que ésta las pagaría. De ese total, se habrían enviado 70 con la intención de firmar un contrato de comodato, y cuya mayoría se habrían instalado en el casino de Viedma. Ese convenio no se habría firmado y ante la rescisión de la relación comercial entre las empresas Pradión S.A. y Varsa, la primera reclamó el pago y ante la falta de respuesta intimó a Varsa para que devolviera las máquinas. El incumplimiento de este pedido generó la presentación de la denuncia penal por la presunta retención indebida, Varsa se habría negado a restituir las máquinas fundamentando que se las habían vendido, lo que fue considerado un perjuicio por la firma denunciante. Cerca de las 10 de la mañana de ayer se observó una llamativa presencia policial en la puerta del casino viedmense. El arribo al lugar de la fiscal Daniela Zágari indicó que en el tema intervenía la Justicia rionegrina y luego fue confirmado el allanamiento y secuestro de los tragamonedas en sede judicial. También se observó la presencia de pocos empleados que atendieron a los funcionarios judiciales, abogados y policías y algunos directivos de la casa de juego que al informarse de lo sucedido se trasladaron a Tribunales para tratar de dialogar con el juez. Finalizado el trámite, ofrecieron detalles de la denuncia García Osella y Santiago Vegezzi, un abogado del estudio de la Capital Federal Moreno Ocampo y Wortman Jofré, que lleva adelante esta denuncia. Los abogados explicaron que Pradión S.A. fue gerenciadora de Varsa, es decir, que "ejercía un control de gestión para poner las cuentas en orden". Puntualizaron además que se reclamó la inhabilitación de las máquinas "para que no sigan gozando de la perpetración de un delito. Pedimos que si tienen las máquinas que no sigan gozando de ellas hasta que se concrete la restitución que está ordenada pero que no se pudo realizar porque se necesitan técnicos para moverlas". |
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