Hay un demorado por el crimen del ex petrolero

Centralizaron la investigación en Valentina Sur, donde apareció el auto de Zalazar. Hallaron evidencias que peritarán

NEUQUEN (AN)- Tres allanamientos, la demora de un sospechoso y el secuestro de varios elementos que están bajo análisis, le dieron ayer un fuerte impulso a la investigación del asesinato de Julio Zalazar, el ex empleado jerárquico de una petrolera apuñalado el domingo en el barrio San Lorenzo.
Los operativos se realizaron ayer al mediodía, con un gran despliegue policial, en el barrio Valentina Sur. En ese sector de la ciudad fue hallado el lunes el Fiat Palio blanco de Zalazar sin las ruedas ni la batería.
El demorado, cuya identidad no fue suministrada, es un joven vecino del barrio. Su vivienda fue una de las allanadas por efectivos de las comisarías Tercera, Dieciséis y del departamento Delitos durante la tarde de ayer.
Fuentes de la investigación consultadas por "Río Negro" deslizaron que en esa casa encontraron algunos elementos comprometedores. No fue posible obtener precisiones, pero una versión indicaba que podría tratarse de ropa con manchas de sangre, un cuchillo y una batería de automóvil.
El comisario René Fuentes, jefe de la comisaría 16, se limitó a decir: "estamos siguiendo una buena pista, esperemos que no se corte. En las próximas horas tendremos más novedades".
Por otra parte, los investigadores consiguieron reconstruir un paso más en el recorrido de Zalazar previo a su muerte: ya saben hacia qué sector de la ciudad se dirigió a comprar una cerveza.
Como informó este diario, Zalazar (46 años, ex empleado jerárquico de una petrolera) tuvo una discusión con su esposa el domingo a las 3 de la mañana y se fue de su casa, en Elordi al 4.000, diciendo que iba a comprar una cerveza.
Abordó su Fiat Palio patente BUT047 y salió con un rumbo que hasta ayer era desconocido. Ahora los investigadores saben que es verdad que fue a comprar una cerveza, aunque guardan bajo siete llaves otros detalles que obtuvieron en las últimas horas.
Lo que se presume es que Zalazar fue abordado por varias personas después de hacer esa compra. Su cadáver apareció a las 5.55 en la desolada esquina de República de Italia y Tostado, en el barrio San Lorenzo.
La víctima recibió tres puñaladas en el costado derecho de su cuerpo y otra en la pierna derecha a la altura de la ingle. Sus ropas quedaron ensangrentadas, pero extrañamente no había manchas de sangre ni en el vehículo ni en la calle donde lo dejaron tirado.

El móvil es un misterio

Además, Zalazar tenía dinero en los bolsillo y su reloj. Por eso la Policía descarta, en principio, que el móvil del ataque haya sido el robo.
Su auto desapareció. Lo encontró alguien que el lunes a la madrugada avisó en forma anónima: estaba oculto bajo unos sauces cerca del río Limay, en Valentina Sur. Le faltaban las cuatro ruedas y la batería, pero tenía la rueda de auxilio, el crique y otros elementos.
Por eso también se descarta, en principio, que el móvil haya sido el robo del automóvil.
¿Por qué mataron a Zalazar entonces? Es la pregunta que sigue sin respuesta. Acaso la incógnita recién quede despejada cuando se sepa con certeza quiénes fueron los autores.
Por si le faltara misterio al caso, otro interrogante inquieta a los investigadores: el arma. "Es raro que no lo hayan abordado con un revólver, y que hayan utilizado un cuchillo para matarlo", señaló una de las fuentes consultadas por este diario.

Foto: Tras uno de los allanamientos en Valentina Sur, se logró la detención de un sospechoso del crimen de Julio Zalazar.