Sombrío panorama para la economía en Latinoamérica

Las principales economías del continente sufrirán las consecuencias de la recesión estadounidense agravada por los atentados del 11 de setiembre, aseguró ayer la CEPAL. En el 2000 el crecimiento fue de apenas 0,5%.

Santiago de Chile (EFE).- La fuerte desaceleración de la economía mundial en 2001 frenó la recuperación en América Latina y el Caribe en el año 2000, donde el PIB creció apenas el 0,5 y las perspectivas de crecimiento para el 2002 se quedan en el 1,1%.
Así lo afirma el informe anual de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), según la cual la crisis en la región, exceptuando a Argentina, "pudo ser mayor habida cuenta de la magnitud de los factores externos negativos durante el 2001".
El producto interno bruto para el conjunto de la región se incrementó un 0,5 %, mientras que el producto por habitante declinó en un 1 por ciento.
"El consumo regional se estancó y la inversión bruta fija se redujo un 1 por ciento, en tanto las exportaciones se incrementaron algo más del 2 y las importaciones no variaron". Como datos positivos, "la inflación siguió disminuyendo y el aumento en el déficit externo fue modesto", según el informe.
La CEPAL subraya la vulnerabilidad regional frente al entorno económico internacional, crisis agudizada "por el aterrizaje más brusco que lo previsto de la economía estadounidense" en el 2001.
Según la CEPAL, "el temido efecto contagio de la crisis financiera de Argentina se atenuó (...) y hacia fines de año los problemas financieros argentinos aparecían aislados del resto de la región". A causa de la desaceleración de la demanda externa, la mayoría de los países redujeron sus ingresos por exportaciones y "todos sufrieron una caída de los precios de sus productos ".
"El déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos se elevó a unos 53 000 millones de dólares, equivalentes al 2.8 por ciento del PIB regional".
La entrada neta de capitales, insuficiente para financiar el déficit regional de cuenta corriente, "tuvo que destinarse íntegramente, por tercer año consecutivo, al pago de la deuda externa".
Dos rubros principales de exportación se vieron especialmente afectados: los precios del petróleo y sus derivados disminuyeron en un 20% y los del café se desplomaron nuevamente, esta vez en un 30%, en el cuarto año de caída.
El resultado fue una merma generalizada de ingresos por exportaciones, cuyo total regional descendió a poco más de 390.000 millones de dólares, un 3,5 por ciento menos que en el 2000.
El ingreso de capitales autónomos en América Latina ascendió a 33.000 millones de dólares, "una drástica caída respecto a los 67.000 millones ingresados en 2000" a causa del "extraordinario vuelco negativo sufrido por Argentina de más de 20.000 millones y a la reducción de los flujos hacia Brasil".

Leve mejora en Chile, México y Brasil

El informe indica que "hay todavía muchas incertidumbres respecto de la esperada reactivación de las economías de América Latina y el Caribe en 2002"
Como previsiones, la CEPAL subraya que se espera "una modesta reactivación en México y en Costa Rica (...) y es probable que Brasil mejore un poco". "Los países del Cono Sur en conjunto registrarían una nueva caída en el producto", a causa de Argentina, "cuyas perspectivas son poco alentadoras ". "En cambio, Chile continuará mostrando un crecimiento moderado y Uruguay tendrá un resultado menos adverso que en el 2001.
La Comunidad Andina continuará incrementando, aunque levemente, su expansión del nivel de actividad".
Por segundo año consecutivo, la inversión extranjera directa neta se redujo en la región, esta vez a 58.300 millones de dólares desde los 64.800 millones en 2001, "caída que afectó de manera muy notoria a Argentina, Brasil y Venezuela, y en cambio Chile revirtió el saldo negativo del año anterior".
El déficit fiscal "volvió a ampliarse, ahora a 3.1 por ciento del producto para el total de América Latina y el Caribe".
La deuda externa bruta de América Latina mostró una moderada disminución, de 740.000 millones de dólares en 2000 a 726.000 millones en 2001.

Foto: Pocas esperanzas de mejoras para los pobres de América Latina.